Ponencia para segundo debate al proyecto de ley 283 de 2009 senado - 31 de Julio de 2009 - Gaceta del Congreso - Legislación - VLEX 451467806

Ponencia para segundo debate al proyecto de ley 283 de 2009 senado

PONENCIA PARA SEGUNDO DEBATE AL PROYECTO DE LEY 283 DE 2009 SENADO. por la cual se aprueba el ¿Acuerdo Bilateral para la Promoción y Protección de Inversiones entre el Gobierno de Colombia y el Gobierno de la República Popular China¿, suscrito en Lima, Perú el 22 de noviembre de 2008.

Bogotá, D. C., julio de 2009

Doctor

JAVIER ENRIQUE CACERES LEAL

Presidente

Senado de la República

Ciudad

Respetado Presidente:

En cumplimiento del encargo hecho por la Mesa Directiva de la Comisión Segunda del Senado de la República y con fundamento en los artículos 150, 153 y 156 de la Ley 5ª de 1992, nos permitimos rendir ponencia para segundo debate al Proyecto de ley número 283 de 2009 Senado, por la cual se aprueba el ¿Acuerdo Bilateral para la Promoción y Protección de Inversiones entre el Gobierno de Colombia y el Gobierno de la República Popular China¿, suscrito en Lima, Perú el 22 de noviembre de 2008, en los siguientes términos:

Trámite Legislativo

El proyecto de ley fue radicado por el Gobierno Nacional a través del Ministro de Relaciones Exteriores y el Ministro de Comercio, Industria y Turismo el 1° de abril de 2009; posteriormente fue publicado en la Gaceta del Congreso número 188 de 2009 y repartido para ser estudiado en la Comisión Segunda Constitucional Permanente, de esta manera se rindió ponencia favorable para primer debate como consta en la Gaceta del Congreso número 429 de 2009, cuyo informe fue aprobado unánimemente en sesión de esta célula legislativa el 17 del junio de 2009, previo anuncio en la sesión anterior del martes 16 de junio de este mismo año.

Objetivos del proyecto: La importancia de China en el escenario mundial

La República Popular China se ha consolidado en los últimos años como una de las potencias económicas emergentes a nivel mundial. Fortalecer los lazos económicos con el `gigante asiático¿ es un imperativo para toda economía desarrollada o en desarrollo.

Este Acuerdo, constituye además un acercamiento importante de Colombia hacia el Pacífico asiático el cual se ha convertido en uno de los polos más dinámicos de la economía mundial, un núcleo de desarrollo y crecimiento económico, un epicentro de comercio e inversión, un líder en avances tecnológicos y un escenario importante de integración y cooperación económica, tal como lo han reconocido las múltiples misiones de miembros del Congreso de la República y del Gobierno Nacional que han visitado ese país.

Debe señalarse, además, que el Gobierno y el Congreso colombianos han venido trabajando conjuntamente por varios años para brindar cada día mayor seguridad jurídica y un mejor clima de negocios, de tal forma que se den mejores condiciones para la inversión en el país[1][16].

Si bien es claro que la coyuntura actual en la que se estudia el proyecto es un escenario de crisis que implica una fuerte contracción en los flujos de capitales que se redireccionan hacia mercados más seguros, esto no implica de ninguna manera la supresión de las iniciativas dirigidas a complementar el marco jurídico que incentivan la llegada de inversión extranjera: al contrario, los tiempos de crisis presentan condiciones ideales para fortalecer las relaciones y reformar los marcos legales que permitan, en el momento que la economía se reactive nuevamente, contar con herramientas nuevas, claras y precisas que faciliten el ingreso de capitales desde nuevos destinos, transferencia de tecnología y fortalecimiento del comercio de servicios.

La experiencia del desarrollo chino en los últimos 30 años, basado en un particular modelo donde ha combinado factores base de países emergentes como un fuerte crecimiento de las exportaciones y la inversión extranjera directa, junto con otros aspectos propios de los modelos de expansión de los países desarrollados, a saber, control efectivo de la inflación, dinamicidad constante en los flujos de consumo y actividad industrial, ha sido realmente impresionante. Petkoff (2005) analiza esta serie de eventos y atribuye como semilla de este crecimiento a la capacidad que tuvo el Gobierno y las industrias nacientes de entender que, dadas las condiciones de globalización que se estaban generando, era imperante conciliar el régimen comunista dictatorial de centralismo político, con una operación económica que no ha sido diferente de una estrategia capitalista en el comercio de servicios y en áreas industriales plenamente identificadas: lo que los comunistas chinos han denominado como la doctrina del ¿socialismo de mercado¿[2][17]. Por otra parte, Cano (2004) resume el modelo de desarrollo chino resaltando en principio que ¿cuenta con una abundante, barata y bien formada mano de obra, que le ha permitido llevar a cabo las reformas estructurales ya decididas en la década de los 70 por los dirigentes políticos, que mostraron una loable capacidad de anticipación¿[3][18].

¿Estas reformas estaban encaminadas, de forma clara, hacia una economía de mercado y abierta al exterior. Así, se ha llevado a cabo un proceso de industrialización de una economía eminentemente rural que ha sido sostenido por un ingente proceso inversor, financiado tanto de forma doméstica (gracias a la elevada tasa de ahorro que en 2004 alcanzó el 45% del PIB) como internacional (China en 2004 llegó a ser el primer país receptor de inversión extranjera directa[4][19] y alcanzó el tercer puesto en términos de stock)¿[5][20] cifras que se han mantenido con tendencia moderadamente creciente en los últimos años, sosteniéndose como principal destino de las inversiones en la región Asia-Pacífico[6][21] (Cuadro 1)

Cuadro 1:

Flujos de IED por regiones y en algunos países, 2005-2007 (En miles de millones de dólares y porcentajes)

CONSULTAR TABLA EN FORMATO PDF O EN EL ORIGINAL IMPRESO

Fuente: UNCTAD, World Investment Report 2008: Transnational Corporations and the Infrastructure Challenge.

Este proceso ha significado un crecimiento acelerado con tasas reales superiores al 10% desde 2003 (siempre muy por encima del crecimiento mundial, pero con tendencias muy similares - Gráfico I), lo que ha hecho que el Producto Interno Bruto de China haya pasado de representar el 3.48% del PIB mundial en 1999 a 7.25% en 2008 y según estimaciones del Fondo Monetario Internacional esta relación llegaría a 12.04% en 2014 (a precios corrientes). El análisis macroeconómico de los fundamentos de este fenómeno merece una extensión que sobrepasa los alcances de este documento, sin embargo, como ya se dejó entrever, vale la pena resaltar como pilares de su desarrollo su fuerte expansión del sector exterior y en la inversión empresarial, en un contexto en el que el superávit por cuenta corriente ha sido permanente (Gráfico II).

CONSULTAR GRAFICO EN FORMATO PDF O EN EL ORIGINAL IMPRESO

Gráfico I ¿ Crecimiento Real de China y el Mundo

Fuente: International Monetary Fund, World Economic Outlook Database, April 2009 - * Estimaciones del Fondo Monetario Internacional (a partir del 2009).

CONSULTAR GRAFICO EN FORMATO PDF O EN EL ORIGINAL IMPRESO

Gráfico II ¿ Balance en Cuenta Corriente de China como % del PIB

Fuente: International Monetary Fund, World Economic Outlook Database, April 2009 - * Estimaciones del Fondo Monetario Internacional (a partir del 2009).

CONSULTAR GRAFICO EN FORMATO PDF O EN EL ORIGINAL IMPRESO

De todas formas, la evolución de industrialización y tercerización seguramente aún no está completa y se encuentra en pleno proceso, como lo evidencia el hecho de que la rama primaria de la economía haya representado en 2007 un 11.3%, mientras el sector industrial lo hace en 40.1%[7][22] cifras aún alejadas de lo mostrado en los países más desarrollados como Reino Unido, Francia y Estados Unidos, cuyos sectores agrícolas y de materias primas representan alrededor del 2% y el sector terciario cerca del 70%.

Esto significa que la República Popular China lejos de ser una competencia directa de Colombia, puede representar un mercado complementario, no solo ante la avidez de los inversionistas chinos por nuevos mercados y en rápido crecimiento como el latinoamericano, sino ante el cambio en los patrones de consumo de su enorme población que puede significar un renacimiento de sector agropecuario y de materias primas en Colombia.

Así se manifestó en la Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo realizada en Medellín este año: por ejemplo Alicia García-Herrero, economista jefe de BBVA para Mercados Emergentes, durante su presentación en el Foro ¿Relaciones Económicas de China y América Latina: retos y oportunidades¿ declaró que ¿Los gobiernos de América Latina deben ver en China una oportunidad en materia comercial y de inversión en los países y hacer los esfuerzos que sean necesarios para mejorar las relaciones con el gigante asiático¿[8][23].

De acuerdo con García-Herrero, durante mucho tiempo, América Latina ha visto a China como un competidor en el mercado de manufacturas, pero el país asiático ya se ha dado cuenta que puede ser un socio estratégico para dinamizar el comercio exterior y la inversión...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR