La actualidad del pensamiento político de Maquiavelo
Autor | Antonio Hermosa Andújar |
Cargo | Doctor en Filosofía, UNED, España |
Páginas | 13-36 |
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Revista Co-herencia Vol. 10, No 19 Julio - Diciembre 2013, pp. 13-36. Medellín, Colombia (ISSN 1794-5887)
La actualidad del
pensamiento político
de Maquiavelo*
Recibido: mayo 10 de 2013 | Aprobado: agosto 4 de 2013
Antonio Hermosa Andújar**
hermosa@us.es
* Conferencia impartida
con motivo de la aper-
tura del semestre acadé-
mico 2013-I del pregra-
do en Ciencias Políticas
de la Universidad EA-
FIT, a propósito de la
conmemoración de los
500 años de El príncipe.
** Doctor en Filosofía,
UNED - España. Pro-
fesor, Universidad de
Sevilla-España. Direc-
tor de Araucaria. Revista
Iberoamericana de Filoso-
fía, política y humanida-
des.
Introducción
Vencer mediante la gloria o la fama el cerco
que con nuestra vida el tiempo pone a nuestra
memoria fue el ideal del héroe antiguo; mante-
ner en vida las gestas, y a sus autores, que me-
recían sobrevivir a su tiempo fue el ideal que
se marcaron, junto a ciertos poetas, los histo-
riadores antiguos, y por eso escribieron historia:
para enseñar a la política modelos a adoptar y al
futuro verdades eternas que aprender en aras de
instituir un mejor orden social.
Maquiavelo alcanzó el ideal del héroe an-
tiguo mediante su tarea de historiador y de po-
litólogo, y hoy forma parte de los dioses elegi-
dos, de esa restringida constelación de clásicos
olímpicos cuya presencia se percibe constante-
al contenido de su doctrina, que iremos desgra-
nando en sus elementos fundamentales de los
que, uno por uno, intentaremos demostrar su
actualidad o inactualidad.
Método: historia y conocimiento. La
naturaleza humana
La doctrina maquiaveliana reúne antropo-
logía y política convirtiendo a la primera en
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fundamento de la segunda. El procedimiento mediante el que se
construye dicha unidad es el método inductivo, que proclama sus
verdades mediante inferencias empíricas. Digámoslo ya: no es de
absolutas tales verdades, y por ello, en ese aspec-
to, Maquiavelo no es actual. Pero mutatis mutandis el resto de ideas
comprendidas en dicha relación entre antropología y política hace
que se inicia toda investigación no hay ciencia, salvo en los ca-
sos de la matemática y la lógica. Desde luego, no habría ciencias
sociales, la política entre ellas. Es lo que hace Maquiavelo, bien
que extremando la función oracular -por valernos de la metáfora de
constancia de la bondad y maldad connaturales al hombre, así como
de su condición social. Y a través de esa identidad de la naturaleza
humana se accede con naturalidad a reivindicar el estudio de los
hechos presentes y pasados, de los hechos políticos actuales y de
los históricos, como una función de la política; o, por decirlo con
una palabra de claro regusto maquiaveliano, como una necesidad. El
conocimiento de las eternas verdades presentes en la experiencia
contemporánea e histórica permite al gobernante moverse con gran
soltura en el proceloso mar de la conservación del Estado y su man-
tenimiento en el gobierno.
Notemos que el conocimiento político, al basarse en la identi-
dad de la naturaleza humana, produce dos nuevas consecuencias,
una metodológica y otra técnica. La primera consiste en el empleo
de la analogía como la operación intelectual que el príncipe acabará
transformando igualmente en fuente de su acción. Son hechos y
situaciones como la suya ya vividas en el pasado o el presente las
que él tendrá en cuenta antes de optar en un sentido u otro al objeto
de imitarlos. La mera conservación del cargo se lo pide: debe imitar
a los mejores, a los inaccesibles, para lograrlo, pero ello implica la
operación de comparar lo diverso para hallar lo común y obrar en
consecuencia, o mejor, sabiendo de antemano las consecuencias.
Prudencia es como se llama a ese tipo de acción en política. (Una
continuación de aquella primera y heroica manifestación en la que
el príncipe pudo reconocer en un contexto desordenado el momen-
to de la ocasión que le llevaría al trono). El comparatismo del que
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La actualidad del pensamiento político de Maquiavelo
Antonio Hermosa Andújar
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