Hacia una lectura crítica del derecho administrativo: comportamiento burocrático y política social
| Autor | Lina Fernanda Buchely Ibarra |
| Cargo del Autor | Doctora en Derecho de la Universidad de los Andes |
| Páginas | 155-184 |
Capítulo VI
Hacia una lectura crítica del derecHo
administrativo: comportamiento
burocrático y política social
Estudio de caso de los Hogares Comunitarios
de Bienestar y el poder transformador
de las burocracias callejeras
Lina Fernanda BucheLy iBarra*
1. introducción
En enero del 2012, Gloria Prada dejó a su hija María Camila con
su amiga Magnolia Riaño1. Eran las 8 de la mañana y el Hogar Co-
munitario de Bienestar Burbujas de la localidad de San Cristóbal Sur
estaba abierto como siempre. Al llegar, las dos amigas hicieron el
saludo largo de rutina, y María Camila entró a la casa de Magnolia,
donde todos los días esperaba a que su madre la recogiera después de
su trabajo, a las 6 pm.
Magnolia Riaño había sino madre comunitaria toda su vida. Apren-
dió la labor de Laura, su mamá, quien también ejerce esta labor. Mag-
nolia empezó el Hogar Comunitario de Bienestar (en adelante, hcB)
en su casa hace cinco años. Ella es una mujer joven y capacitada, ha
hecho todos los cursos sobre cuidado de niños que le ha asignado el
1 Este caso se basa en una historia comentada por una funcionaria del icBF en en-
trevista realizada el 13 de agosto de 2012. Los nombres de las personas y los lugares
involucrados son cticios.
* Doctora en Derecho de la Universidad de los Andes; magíster en Derecho e Institu-
ciones Legales en la Universidad de Wisconsin-Madison. Politóloga, abogada y magíster
en Derecho de la Universidad de los Andes. Actualmente es la directora del Programa de
Derecho de la Universidad Icesi. Tiene publicaciones relacionadas con temas de teoría
jurídica, sociología del derecho y estudios de género [e-mail: lfbuchely@icesi.edu.co].
Nuevas teNdeNcias del de recho admiNistrativo156
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (icBF), y le encanta su tra-
bajo. Le encanta, porque no hay nada mejor que recibir el afecto de
los niños y poder estar en su casa cerca de sus propios hijos.
Ese martes era soleado. Los niños siempre estaban encerrados y
hacía un buen tiempo que Magnolia pensaba en sacarlos al parque.
Como el sol bogotano es algo esquivo, Magnolia no había programa-
do la salida en el planeador del icBF, pero iba con su auxiliar Margarita,
así que los 14 niños que tenía a su cargo no iban a correr peligro.
Salieron al parque, a tan solo una cuadra de la casa de Magnolia.
Fueron con todas las precauciones, cogidos de la mano, mientras veci-
nos y transeúntes los saludaban. El hogar comunitario era algo que le
pertenecía desde hace mucho tiempo al barrio, y con el cual ya todos
ellos estaban familiarizados.
Llegaron al parque y Magnolia y Margarita se dividieron a los ni-
ños y las niñas para jugar en los distintos entretenimientos del parque.
Mientras Magnolia fue a la rueda, Margarita estaba en los columpios.
Ya varios de los niños se habían columpiado, pero por un descuido
pequeño, María Camila, la hija de Gloria, se cayó al suelo. Recibió el
golpe en el costado derecho de su cara. Le salía mucha sangre y llora-
ba mucho. Tras la reacción inicial Magnolia salió directamente desde
el parque al Hospital Cruz Verde, para que atendieran a la niña. En el
taxi, Magnolia se comunicó con Gloria, para que llegara al Hospital
y llevara la documentación necesaria para que la niña fuera atendida.
Una hora después, las dos amigas se encontraron en urgencias, en una
situación muy incómoda.
María Camila sufría desde su nacimiento de una enfermedad congé-
nita llamada síndrome de Ehlers-Danlos, una deciencia de colágeno
en la piel que impide su cicatrización. Por ello, un golpe que podría
haber sido rutinario para cualquier niño le tenía desgurada media
cara. En el hospital, frente al diagnóstico del médico que resultaba en
la sugerencia de un trasplante de rostro, Magnolia acusaba a su amiga
Gloria de esconderle información importante de la niña para acceder a
la inscripción del hcB, mientras Gloria le reprochaba a la madre comu-
nitaria su gran descuido con sus niños en el parque. En efecto, los
antecedentes médicos de María Camila registrados en la inscripción
en el icBF no mencionaban nada acerca de su enfermedad.
Al día siguiente, aun con María Camila en el Hospital, Gloria fue
al centro zonal del icBF a tramitar una queja formal en contra del hcB
Burbujas y solicitar ayuda económica para la operación de su hija.
Para ella y sus vecinos, el icBF debía responder por el descuido de
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba