Mirada panorámica al contexto intelectual del siglo XIII
| Autor | Diego Alejandro Gracia Ortiz |
| Cargo del Autor | Licenciatura en Filosofía y Letras por la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín |
| Páginas | 59-86 |
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PRIMERA PARTE
Mirada panorámica al contexto intelectual del siglo XIII
las condEnas univErsitarias dE los años 1241,
1270 y 1277
Según A. de Libera (1999, 413), este periodo de aculturación en
sus treinta primeros años se vio sacudido por un cierto número de
reacciones anti-orientales. De 1204 a 1261 asistimos a la victoria
de Miguel VIII Paleólogo sobre el emperador latino de Cons-
tantinopla Baduino II. Según la historia, en 1241 las autoridades
universitarias y eclesiásticas condenaron una serie de diez pro-
posiciones enseñadas por maestros parisienses, y entre esas tesis
se evoca directamente la teología griega. La primera concierne
a la visión beatífica, es decir, que la esencia divina en sí no es ob-
jeto de la visión humana, como tampoco de los ángeles. Se trata
de la tesis griega acerca de la incognoscibilidad de un Dios sólo
accesible a la luz increada del Tabor; tesis que por lo demás llegó
a ser muy popular en el siglo XIV gracias a Gregorio Palamas,
y que fue sustentada por Scoto Eriúgena en sus Teofanías. Se la
condena formalmente en beneficio de la tesis latina agustiniana
acerca del conocimiento inmediato de la esencia divina. La ter-
cera posición afirma que el Espíritu Santo, en tanto que lazo de
unión, no procede del Hijo, sino del Padre. La séptima se refiere
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a la presencia de una pluralidad de ideas en Dios que no son Dios;
es decir, que hay algunas verdades que son eternas pero que no
son de Dios. Se trata de la explicación del medium que nos hace
a Dios accesible o participable.
Tomada por instigación de Guillermo de Auvergne, obispo
de París, y firmada por el canciller Études de Châteauroux, la
medida de 1241 en contra de los griegos confirmaba de paso la
prohibición sobre Scoto Eriúgena, después de la prohibición de
Honorio III (1225). Tuvo dificultades para imponerse durante
los años 1243, 1244 y 1256. Así, los Capítulos Generales de los
Hermanos Predicadores (dominicos), a los que se refiere proba-
blemente la medida de 1241, debieron reafirmar la necesidad de
expurgar los escritos de los lectores y estudiantes que contuvieran
trazas o elementos condenables.
Tras este golpe que detenía la difusión de las ideas griegas, los
agustinianos instauraron un segundo proceso para blindar a Oc-
cidente frente a Oriente. Esta vez el objetivo era el peripatetismo
árabe, cuya condena iba a incluir al mismo Tomás de Aquino. El
10 de diciembre de 1270, Étienne Tempier, obispo de París, pro-
híbe la enseñanza de las siguientes trece tesis filosóficas:
1. Sólo hay un intelecto numéricamente idéntico para toda
la humanidad.
2. La proposición “el hombre piensa” es falsa o impropia.
3. La voluntad humana quiere o escoge por necesidad.
4. Todo lo que sucede aquí abajo (pro statu isto) se halla so-
metido a la necesidad de los cuerpos celestes.
5. El mundo es eterno.
6. Nunca hubo un primer hombre.
7. El alma, que es la forma del hombre en tanto que hombre,
perece al mismo tiempo que su cuerpo.
8. Después de la muerte el alma, al estar separada del cuerpo,
no puede quemarse en un fuego corporal.
9. El libre albedrío o la libertad es una potencia no activa que
es movida por la necesidad del deseo.
10. Dios no conoce los singulares.
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