Tres ‘señoras’ ante el humilladero - 19 de Febrero de 2024 - El Tiempo - Noticias - VLEX 1017465971

Tres ‘señoras’ ante el humilladero

El humilladero era un lugar destinado a la devoción. Ante una cruz o un obelisco, en la entrada de los pueblos, se postraban los caminantes para terminar el viacrucis o hacer rogativas y, en ocasiones, allí se castigaba a los infractores de algún delito menor. La descripción viene a cuento a propósito de la elección de fiscal general de la Nación, pero puede suceder en otros poderes: "Hay que pasar por ‘el humilladero’ ", me dijo una abogada, refiriéndose al lobby requerido para ganar, uno por uno, el favor de quienes eligen a las personas en cargos judiciales. Es un secreto a voces la necesidad de esas genuflexiones que suelen pesar mucho más que los currículos y las exposiciones de los candidatos en las entrevistas, y es otro secreto también la desventaja que conlleva el ser mujer, como está ocurriendo ahora con la elección de la fiscal general. Las declaraciones de Jaime Arrubla, expresidente de la Corte Suprema de Justicia, son elocuentes: "Si a usted le envían una terna de gente muy clara, muy prestante, que conoce el Estado, pues eso facilita... pero cuando le envían una terna de tres señoras que conocen el oficio, pero es que no nos olvidemos de que el Fiscal General de la Nación tiene un cargo de los más altos cargos de la nación... No es una persona que va a llevar expedientes, estas tres personas están enseñadas a llevar expedientes". Si semejante declaración de Arrubla no ha sido objeto de mayor indignación o de "pedagogía", como les gusta decir ahora a los políticos, quizás se deba al hecho de que transmite una especie de jurisprudencia cultural normalizada en los círculos de poder, que conjuga la solidaridad de cuerpo (masculino) y el prejuicio sobre la inferioridad de las mujeres para ocupar cargos de poder real en el Estado. Decir "tres señoras" -de milagro no les dijo "niñas"- ilustra ese mismo desdén que hace llamar "doctor" a cualquier varón con un currículo similar o inferior al de una mujer a la que se quiere mantener "bajo control", y, en...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR