Apéndice
| Páginas | 321-342 |
A mayor abundamiento y para completar el carácter de utilidad que tiene este
libro, vamos a publicar, como advertimos hace poco, siquiera el índice de las leyes
penales, y algunas disposiciones constitucionales o de Tratados internacionales,
expedidas después de 1858. Recuérdese lo que dijimos sobre el plan de este trabajo.
Algunas notas serán indispensables.
1858. —Mayo 22. Constitución. Concédese libertad de imprenta sin li mitación
alguna.
1858. —Junio 2. Delitos y penas de la competencia de la confederación.
1858. —Junio 25. Establecimientos de castigo.
1859. —Febrero 11. Conmutación de la pena capital.
1859. —Febrero 12. Amnistía por delitos políticos.
1860. —Abril 25. Orden interior de la confederación y reformatoria de las
disposiciones penales relativas a los delitos contra el orden público.
Deroga-
torio de los artículos 462 a 464 del Código Penal
1863. — Mayo 8. Constitución. Garantiza se la inviolabilidad de la vida humana
por causa penal, y las libertades absolutas de prensa y palabra. El Gobierno
General legislará en materias penales, en los asuntos de su incumbencia,
como son los delitos cometidos en alta mar, los Territorios y los que violen
el Derecho Internacional. La pena corporal no puede pasar de 10 años139.
139 He ahí en pocas líneas, la más grande las revoluciones hechas en el Decreto penal patrio. Ni la
República, ni los Estados podían excederse de los límites que trazó la carta de Rionegro. La abolición
absoluta del cadalso; las penas restringidas a 10 años; la facultad de legislar y de imponer penas
según la organización psicológica, biológica y social de cada pueblo; la caducidad de las leyes que
castigaron la palabra y el comercio de armas, esas son las principales conquistas de 1863. El Derecho
de 1837, que rigió hasta 1873 en lo nacional, quedó socavado y revolucionado por completo, en
todas sus fases. El Código granadino siguió siendo un esqueleto agujereado por los proyectiles con
que la nueva idea dio muerte al que un tiempo fue organismo lleno de vigor.
por
322 Arturo Qu ijano
1871. —22, de 11 de abril. Policía de la frontera
1873. —112, de 26 de junio. Código Penal14 0.
188 5. — Noviembre 30. Acuerdo sobre reforma constitucional. Se dejará
toda la legislación penal a la Nación; se acabará con las libertades
absolutas de imprenta y palabra; se impondrá la pena de muerte por
1886. —agosto 5. Constitución. Se deja al Gobierno la facultad de
reglamentar la prensa, mientras no hay ley. Si se ofrece juzgar a alguno
que merezca pena de muerte, se aplicará el Código Penal Cundinamarca,
de 1858. Sigue rigiendo la legislación propia en cada Estado, hasta que la
1886. —32, de 26 de octubre. Propiedad literaria y artística
1886. —156, de 18 de noviembre. Regula el ejercicio de la facultad
concedida al Ejecutivo por el artículo 119, inciso 6º. De la Constitución.
número 7.710; y los acuerdos 3º y 5º del Consejo de Estado, febrero y
agosto, 1889, Diario Ocial
1887. —57, de 15 de abril. Desde el 15 julio regirá en toda la República
el Código Penal de Cundinamarca sancionado el 16 octubre 1858, con
las adiciones y reformas de los artículos 63 a 71 de esta ley141.
el señor Justo Arosemena , 1863, respecto del cual anota, que “No he podido conocer este texto”,
y de nuestra parte, tampoco lo hemos podido localizar, desafortunadamente, el doctor
no señala el origen de esta referencia. Jorge, Bibliografía jurídica Colombiana.
Derecho Penal, Compilaciones, ...., (Op. cit.), Volumen XII, número 2, 1969, p. 115. Volumen XII,
número 2, 1969, p. 115.
140 Este Código vino a reemplazar al de 1837, el cual estaba en mucha parte reñida con las luces del
siglo. Sin embargo, en 1873 se exageró el liberalismo de 1863, pues los diez años de presidio, que
era la pena mayor que permitió la Constitución, se escatimaron mucho. Además, admitíase en 1873
cierta rebaja de penas por delitos cometidos en “duelo leal”.
141 Retrocedimos, pues, en la evolución, de un sólo golpe, no treinta, sino cincuenta años, por cuanto pocas
diferencias hay entre los Códigos de 1837 y 1858. Hasta la pena de infamia la conserva éste; y sólo
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba