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Las basuras a cielo abierto que afectan a Barranquilla

LEONARDO HERRERA DELGANS - Corresponsal de EL TIEMPO - Barranquilla @leoher79
La lucha contra los basureros a cielo abierto en Barranquilla parece no tener fin. Esa vieja costumbre de muchos barranquilleros de tirar a los arroyos colchones, escombros, llantas, ropa, neveras, plásticos, animales muertos y cualquier cantidad de desechos domésticos que tengan en las casas sigue generando trabajo y costos a la ciudad. No obstante los esfuerzos de las autoridades y las campañas de sensibilización, estos focos de contaminación proliferan en distintos sectores de la ciudad, poniendo en riesgo la salud pública, el medioambiente y la buena imagen de esta capital. Solo en dinero, la Agencia Distrital de Infraestructura (ADI) invierte al año más de 4.000 millones de pesos para mantener despejados los canales por donde se drena el agua lluvia. Hace un año, justo antes de iniciar la temporada de lluvias, se limpiaron 19.586 metros de arroyos, de donde fueron sacadas 17.958 toneladas de desechos, lo que equivale a la carga que realizan unas 1.200 volquetas doble troque. Para este 2024 ya arrancaron los trabajos de limpieza en nueve arroyos, cuya extensión es de 14.26 kilómetros. Se estima que en Barranquilla hay por lo menos 35 puntos críticos de basuras a cielo abierto. Entre los sectores más afectados se encuentran corredores viales como la calle 30, en el centro; la calle 17, en el suroriente, y La Circunvalar, en el suroccidente, donde es común ver botaderos improvisados. De acuerdo con datos del Distrito, estos sitios generan alrededor de 2.500 toneladas de residuos al mes, lo que se representa un serio problema para los barranquilleros. Hay casos como el que viven los habitantes del barrio Los Andes, donde los carretilleros y camiones han tomado como basurero público un sector de la antigua edificación del Instituto de Seguros Sociales, aprovechando su estado de abandono. Aquí tiran escombros y basuras, lo que mantiene la presencia de roedores y mosquitos. Las quejas y la pelea de la comunidad no han sido suficientes para controlar a las personas que en cualquier momento o descuido aprovechan para tirar basura. "No podemos tener policías aquí las 24 horas, a los policías los queremos es persiguiendo a los ladrones, necesitamos es que la gente tome conciencia del mal que le hacen a la ciudad al tirar basuras a la calle", dijo en tono enérgico Oswaldo López, residente del sector. Otro caso evidente es el del corredor de la calle 17, donde a plena luz del día es común...

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