Casados por lo civil, pero no unidos en matrimonio
Casados por lo civil, pero no unidos en matrimonio
Primera jueza que formalizó la unión de una pareja del mismo sexo, no la llamó matrimonio. Crónica de la boda.
Derechos
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A las 9:50 de la mañana de ayer, Carlos Hernando Rivera y Gonzalo Ruiz Giraldo llegaron al Juzgado 67 Civil Municipal de Bogotá con uno solo objetivo: unirse en matrimonio después de una relación de 20 años. Vestidos de saco y corbata, fueron rodeados por amigos, familiares, medios de comunicación, curiosos y hasta opositores, que querían ser testigos de la primera unión gay ante un juzgado. Desde que la Corte Constitucional falló el derecho de los homosexuales a conformar familia, las uniones habían sido ante notarios. “Esta cita es como quitar la última piedra en este muro de Berlín, es un proceso en el que estamos desde hace unos cuatro o cinco años”, dijo Carlos, que lucía gorra. A las 10 a.m., la jueza Carmen Lucía Rodríguez Díaz los recibió para la diligencia, que durante cuatro horas se realizó a puerta cerrada. Al acto solo ingresaron la pareja, un testigo, un delegado de la Procuraduría y el secretario del juzgado. Mientras afuera organizaciones como ‘Un Hombre y una Mujer’ gritaban arengas en contra del matrimonio de parejas del mismo sexo, en un pequeño salón de los juzgados, en el centro de Bogotá, la jueza dejó en claro a Carlos y a Gonzalo que el contrato que firmarían no podría llamarse matrimonio. Esto, porque la Corte Constitucional conminó al Congreso a legislar sobre el tema y a darle un nombre a ese tipo de uniones. Así la cosas, Carlos y Gonzalo no contrajeron matrimonio, sino que firmaron un “contrato civil innominado”, que fue el nombre que la jueza le dio. Esto significa, según explicó, que “declaró civilmente casada a una pareja del mismo sexo”, a través de un acuerdo de voluntades para formar una familia. Pasadas las 2 de la tarde, Gonzalo, con una tímida sonrisa, fue el primero en salir del despacho. “Fuimos casados, estamos muy felices”, dijo mientras sus familiares y amigos lanzaban arroz, los aplaudían y les cantaban. El abogado de la pareja, Germán Humberto Rincón Perfetti, explicó que el uso de la expresión casados es un gran avance. “Hemos avanzado gigantescamente hoy, al encontrar a una jueza que ha dado todos los derechos que significa que unas personas estén casadas. Nos queda pendiente la palabra matrimonio”, dijo Rincón Perfetti. Expertos en derecho civil explicaron que Carlos, de 57 años, y Gonzalo, de 44, adquirieron los...
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