Conclusión
| Autor | Winifred Tate |
| Páginas | 265-286 |
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Conclusión
Plan Colombia, Putumayo y el imaginario
de la formulación de política pública
Según los formuladores de política pública en Washington, el Plan Colombia fue
un éxito, una feliz excepción a las problemáticas intervenciones de Estados Unidos
en otras partes del mundo durante décadas recientes, tal como en el caso del Oriente
Medio. Durante años, el presidente Clinton llevaba puesta una pulsera tejida con
los colores de la bandera colombiana, amarillo, azul y rojo, como un signo público
de su apego al país y de su visión de que el paquete de ayuda era un legado importan-
te de su gobierno. “Colombia es un modelo para la región”, declaró en 2013 en su
audiencia de conrmación John Kerry, secretario de Estado, “es un ejemplo para el
resto de Latinoamérica sobre lo que les espera si podemos convencer a las personas
de tomar mejores decisiones”.
En esta conclusión, pongo en duda esta narrativa triunfal y ofrezco visiones
de evaluación alternativas. En la mayor parte de este libro, he examinado las fuer-
zas e imaginarios que dieron vida al Plan Colombia, como son la convergencia
del traco transnacional de drogas ilícitas con múltiples proyectos de militari-
zación en Estados Unidos y en Colombia, así como la colisión de esperanzas y
aspiraciones de promotores de derechos humanos en Washington, auxiliares en
el Congreso de Estados Unidos y campesinos del sur de Colombia. Concluyo
con un interrogante sobre el proceso de evaluación de la política pública, en el
cual los indicadores, los marcos y los puntos de referencia escogidos para realizar
la evaluación revelan que determinadas formas de conocimiento de política son
autorizadas y privilegiadas, mientras que otras son descartadas. Así como en el pro-
ceso de problematización de la política pública, las estadísticas usadas en el proceso
de evaluación —que se presentan como transparentes— de hecho requieren de
narrativas que las contextualicen para concretar su signicado. Estas evaluaciones
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Drogas, bandidos y diplomáticos: formulación de política pública de Estados Unidos hacia Colombia
también deben examinarse en cuanto a sus ausencias, que en este caso incluyen los
campos fumigados, los crueles ataques paramilitares y los esfuerzos frustrados en la
organización de la participación colectiva en la formulación de política pública. Las
múltiples historias sobre el origen del Plan Colombia también contienen múltiples
nales, en la medida en que los formuladores de política se dirigieron hacia nuevas
guerras proxy, conjurando amenazas inesperadas y defendiéndose de vulnerabilida-
des nuevamente descubiertas, mientras los habitantes de Putumayo que habían sido
objeto de ataques se orientaron hacia nuevas luchas políticas y novedosos futuros
imaginados.
Un abordaje antropológico necesariamente implica la evaluación tanto de
los formuladores y analistas de política pública como de los sujetos de la política en
cuanto a sus esfuerzos por incidir en el diseño de estos programas y de sus reexiones
sobre el proceso. Los habitantes locales nunca son simplemente receptáculos vacíos
de dichas intervenciones, puesto que disputan activamente estos proyectos, moldean
sus resultados y producen alternativas. El proceso de puesta en práctica de la política
pública conlleva profundos vínculos con estos imaginarios, esperanzas y proyectos
políticos, y las transformaciones resultantes no pueden entenderse de manera aisla-
da sin tomarlos en cuenta. Los esfuerzos por parte de los sujetos de la intervención
para incidir en la política son centrales para comprender los procesos democráticos
contemporáneos. La antropología de la política pública en las democracias se ocu-
pa de cómo se constituye, delinea, autoriza y representa la participación, y también
toma en cuenta los rituales y prácticas que certican los procesos democráticos
(Coles, 2007; Paley, 2001 y 2008). El examen de las iniciativas de promoción de
la democracia y de construcción de la nación revela que estos proyectos se dirigen
más a facilitar
resultados de política especícos que a estimular una amplia vincula-
ción con la gobernanza. En el caso del Plan Colombia, el objetivo de intervenciones
locales llevado a cabo bajo el titular de ‘democratización’ no fue, en otras palabras, el
de incorporar entendimientos y experiencias locales de problemas sociales, sino el de
producir y mantener el dominio de ciertos actores y agendas políticos (Guilhot, 2005).
Los debates actuales sobre política pública en Estados Unidos están orientados
implacablemente hacia el presente. Ser relevante en términos de política pública
signica estar atado a la problematización de la política y a la producción de conoci-
mientos coyunturales. Otros marcos temporales que podrían iluminar los impactos de
las políticas, tales como ciclos agrícolas, ambientales y reproductivos, que se miden en
décadas, son invisibilizados y menospreciados. De hecho, las intervenciones estatales,
tales como la masiva aspersión aérea de herbicidas químicos, programas de sustitución
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