Dololed no va más, su dueño decidió frenar la producción - 31 de Enero de 2020 - El Tiempo - Noticias - VLEX 839718023

Dololed no va más, su dueño decidió frenar la producción

u.investigativa@eltiempo.com @UinvestigativaETLuis Édgar Moreno es el dueño del laboratorio Pronabell, fabricante de Dololed, producto natural a base de caléndula que está en el ojo del huracán por el hallazgo fr cinco lotes contaminados con el fármaco diclofenaco. El Invima ordenó congelar la producción -cerca de 2.000 unidades-, mientras salen los resultados de una contramuestra, para verificar los hallazgos. Pero Moreno, químico de la Universidad Nacional, con experiencia de 35 años en el mercado de productos naturistas, le dijo a EL TIEMPO que tomó una decisión de fondo. Tras admitirle a reporteros de este diario que, en efecto, los lotes contaminados tenían los hologramas y la tinta atóxica que su laboratorio le puso a las cajas -para evitar su falsificación-, anunció que suspendió la venta y fabricación del producto, que se comercializa desde el 2012 tras recibir el registro sanitario. "Es una decisión autónoma para no perjudicar ni a los 400 empleados directos ni a las otras líneas de producción", dijo, acompañado de sus abogados. Pero aclaró que no se trata de admitir ningún tipo de responsabilidad y que, por el contrario, pidió una contramuestra, a TQM, un laboratorio autorizado por el Invima. Y, tras quejarse de los ataques que ha sufrido, confirmó que este jueves recibió otra inspección del Invima. El robo y la defensa Ante los interrogantes de EL TIEMPO, Moreno dijo que sus líos comenzaron cuando, en el 2017, las ventas subieron y médicos empezaron a formular su producto como antiinflamatorio natural. Su laboratorio maneja el 25 por ciento del mercado naturista -unos 240.000 millones al año-, y de esa tajada, el Dololed representa el 5 por ciento. Se estima que, mensualmente, en Colombia se consumían 100.000 unidades de Dololed. Según Moreno, le empezaron a llegar versiones de que estaba siendo falsificado en San Victorino, Bogotá; Neiva y Medellín. "Ahí fue cuando implementé el holograma y la tinta atóxica", explicó. Y el empresario, de 60 años, reveló otro episodio. Dijo que, en el 2017, le robaron un lote de 10.000 unidades de Dololed que, según él, corresponden a los contaminados...

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