Espuma de los acontecimientos - 10 de Abril de 2014 - El Tiempo - Noticias - VLEX 504501726

Espuma de los acontecimientos

Campanadas de alerta

Abdón Espinosa Valderrama

Mientras cundía la idea de que la economía marcha bien en tanto el país va mal, con líquidos corrosivos arrojados a la cara de mujeres indefensas, se producía una serie de documentos que denuncian riesgos que “deberían prevenirse de inmediato”. El más importante de ellos tiene su origen, ni más ni menos, en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según lo revela uno de sus altos funcionarios, Eduardo Lora, en escrito publicado en la revista Dinero. Corroborados varios de sus conceptos por la autoridad académica del premio nobel de Economía Joseph Stiglitz, en el Foro Mundial Urbano de Medellín, al confirmar que el estímulo del crecimiento económico colombiano, por provenir fundamentalmente de recursos naturales, implica apreciación de la moneda y desindustrialización. Desde luego, el impulso al proceso de desindustrialización procede de atrás. Del Consenso de Washington, que el gobierno colombiano de entonces aceptó a regañadientes, a trueque de la luz verde para los empréstitos internacionales. Simbólicamente se exigió y se aceptó el desmantelamiento del Instituto de Fomento Industrial, así como de todo apoyo y estímulo a la agricultura, mientras Estados Unidos los mantenía en la suya. Váyase a saber por qué no han operado, en la práctica, las salvaguardias contempladas en el tratado de libre comercio. El hecho es que, según el estudio del BID, “el país se halla casi tan expuesto a una parada súbita de capitales como cuando estalló la crisis de fin del siglo”, con dolarización de los pasivos de los bancos y déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos, análogo al de l997, antesala de la crisis. El mayor peligro, al tenor del artículo de Lora, es que, con perspectivas de crecimiento relativamente buenas y situación fiscal bastante sólida, se ignoren crecientes riesgos externos y financieros. Se aducirá que en caso de emergencia se enajenarán las “joyas de la Corona”, o sea el capital público amasado por los colombianos a lo largo de los años. A modo de colofón, el citado funcionario anota que “el excelente informe del BID es un campanazo para el nuevo gobierno...

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