Informe de ponencia para primer debate al proyecto de ley 116 de 2005 cámara 229 de 2005 senado
INFORME DE PONENCIA PARA PRIMER DEBATE AL PROYECTO DE LEY 116 DE 2005 CÁMARA, 229 DE 2005 SENADOpor medio de la cual se modifica y adiciona el artículo 131 de la Ley 769 de 2002.
Honorables Congresistas:
Conforme al encargo conferido por la Mesa Directiva de la Comisión Sexta en oportunidad, me permito presentar ponencia negativa al proyecto de ley que modifica y adiciona el artículo 131 de la Ley 769 de 2002 de la siguiente manera así:
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El PROBLEMA DE LA ACCIDENTALIDAD EN COLOMBIA
Nuestro país es amplio conocedor de experiencias en las cuales se cree equivocadamente que el incremento de la sanciones apareja un desestímulo o la eliminación de una conducta socialmente reprochable y/o antijurídica. Un ejemplo palpable de lo anterior lo constituye la Ley 769 de 2002 o Código Nacional de Tránsito Terrestre. Porque a pesar que dicho Código representó un aumento considerable de las sanciones por incumplimiento de las normas de tránsito, los accidentes han aumentado pasando de 189.933 en el año 2002 a 209.904 accidentes en el año 2003. Y la causa de mayor accidentalidad en Colombia es precisamente el incumplimiento de las normas de tránsito como se demostrará más adelante.
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* Datos proyectados
Fuente:
Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses; lo relacionado con víctimas.
INTRA: Accidentes hasta 1992.
DANE: Población.
Ministerio de Transporte: Parque Automotor y número de conductores.
Nota:
*Los datos de accidentalidad de 1993 a 2001, corresponden a una proyección basada en una serie histórica llevada por el INTRA hasta1992.
*El total de accidentes de tránsito para el año 2003, fue calculado multiplicando el número de accidentes reportado por los organismos de tránsito igual a 130.628, los cuales corresponden a ciudades que agrupan el 62.2% del parque automotor, por la relación entre el total nacional del parque automotor (3.540.045 vehículos) y el registrado en dichos organismos (2.203.046 vehículos).
Sin embargo, debemos reconocer que sí hay una reducción, aunque sutil, de las tasas de mortalidad y de heridos por accidentes de tránsito así:
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Fuente: Fondo de Prevención Vial.
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Fuente: Fondo de Prevención Vial.
Como se podrá observar, la accidentalidad vial es claramente un problema nacional de salud pública de primer orden, que debe ser priorizado y gestionado por las diferentes entidades públicas responsables de ello, buscando reducir los riesgos de la movilidad de los ciudadanos mediante labores de prevención. Es mucho más lógico, productivo y socialmente rentable, invertir en la prevención de accidentes que en la atención de los mismos.
Para prevenir los accidentes viales, es necesario invertir en mejores vías, en mejores vehículos, e indudablemente en una mejor cultura de prevención en la ciudadanía, buscando mejorar la capacitación e información de los conductores y de la ciudadanía en general sobre los riesgos que implica la movilidad en nuestro medio. Pero no basta con tener ciudadanos mejor preparados y mejor informados, ni con tener las vías y los vehículos...
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