Informe de Ponencia Segundo Debate Proyecto de Ley 183 de 2015 Cámara, 25 de 2014 Senado
por la cual se promueve y regula el aprovechamiento integral y sostenible de la pesca y la acuicultura en los cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país Por decisión de la Mesa Directiva de la Cámara de Representantes, presentamos ponencia favorable para segundo debate al Proyecto de ley número 183 de 2015 Cámara, 25 de 2014 Senado, por la cual se promueve y regula el aprovechamiento integral y sostenible de la pesca y la acuicultura en los cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país, tal como se aprobó en la Comisión Quinta de Cámara de Representantes.
I. SÍNTESIS DEL PROYECTO
El proyecto de ley fue radicado el 21 de julio de 2014 en el honorable Senado de la República, surtió los debates correspondientes en Comisión Quinta de Senado y Plenaria del Senado de la República en el año 2015, siendo aprobado por unanimidad.
En la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes, los ponentes presentaron catorce proposiciones resultado de las mesas de trabajo realizadas con la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap) y los autores del proyecto; así mismo, el honorable Representante Alfredo Molina Triana radicó una proposición, siendo leídas y posteriormente aprobadas por esta célula legislativa las quince proposiciones presentadas. De igual forma, se aprobó el informe de ponencia y los artículos que no tenían proposición.
Con relación al contenido del proyecto, es importarte resaltar que el mismo busca la unificación de criterios normativos para el manejo y ordenamiento de todos los cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país, de forma que permita su aprovechamiento, en beneficio de la nación, por parte de diversos sectores, y que permita y asegure el crecimiento de la producción piscícola nacional, generando empleos, aumentando las exportaciones y la generación de divisas dentro de un enfoque de desarrollo sostenible y total respeto por el medio ambiente.
Dota de instrumentos administrativos y presupuestales a la Autoridad Nacional de Pesca y Acuicultura (Aunap) para la elaboración, ejecución, seguimiento y control de Planes de Desarrollo Pesquero y Acuícola de los cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país.
Integra el componente ambiental de forma coordinada y coherente, estableciendo responsabilidades institucionales que ya existen dentro de las funciones y objeto de esas entidades.
II. COMPETENCIA
La Plenaria de la Cámara de Representantes es competente para conocer del presente proyecto de ley, de conformidad con lo establecido por los artículos 150, 157 y 160 de la Constitución Política; los artículos 41 y 43 de la Ley 5ª de 1992.
III. ANTECEDENTES
| Naturaleza | Proyecto de ley |
| Consecutivo | Número 183 de 2015 Cámara, 25 de 2014 Senado |
| Título | Por la cual se promueve y regula el aprovechamiento integral y sostenible de la pesca y la acuicultura en los cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país. |
| Autores | Honorables Senadores Ernesto Macías Tovar, María del Rosario Guerra de la Espriella, Alfredo Ramos Maya, Honorio Henríquez |
| Ponentes | Honorables Representantes Fernando Sierra Ramos, Rubén Darío Molano Piñeros, Alonso José del Río Cabarcas y Ciro Fernández Núñez. |
| Origen | Senado |
| Radicación | 21 julio 2014 |
| Publicación | |
| Estado | Pendiente dar cuarto debate |
| Fechas |
IV. CONTEXTO
Tal y como se menciona en la exposición de motivos del proyecto de ley, la actividad piscícola en Colombia ha tenido un crecimiento sin precedentes en la última década, principalmente a causa de las inversiones realizadas por el sector privado para la producción a escala industrial de trucha y tilapia en diversos lagos y embalses del país, actividad que se realiza a través del uso de sistemas de jaulas flotantes.
El departamento del Huila, en el embalse de Betania, ha realizado proyectos que lo perfilan como el principal epicentro de producción piscícola del país. Allí existe una cadena productiva bastante completa, tecnificada y organizada bajo la modalidad de agremiación, cuyo principal producto es el de filete fresco de tilapia para exportación a Estados Unidos, además de abastecer en parte la demanda local.
El embalse de Betania es el único cuerpo de agua del país que cuenta con un Plan de Ordenamiento de la Pesca y la Acuicultura (Popa), el cual implementa el estudio realizado por Hidrosfera Ltda., que estimó la capacidad de carga piscícola e indicó otras recomendaciones para su manejo[1][1].
La capacidad de carga piscícola es una medida de límite de producción que tiene cada ecosistema y opera en función de unas metas de gestión de la calidad del agua para los diversos usos de estas. Mediciones que deben ser armonizadas para una correcta y sostenible gestión ambiental. Es un instrumento técnico de apoyo en la toma de dec isiones referentes al ordenamiento de los cuerpos de agua[2][2].
La experiencia acumulada desde la promulgación del Plan de Ordenamiento de la Pesca y la Acuicultura del embalse de Betania (Popa) Betania en 2005 por el Incoder (entonces con las funciones de autoridad de pesca y acuicultura) indica los aciertos para recorrer el camino correcto. Igualmente, a partir de sus falencias en términos de ejecución, seguimiento y control, se establecen aquellos puntos que necesitan ser corregidos.
Por otro lado, la productividad piscícola del embalse de Betania ha reportado rendimientos más altos que la productividad del sector realizada en estanques en tierra, razón por la cual el sector empresarial buscará desarrollarse preferiblemente en otros cuerpos de agua lénticos artificiales continentales del país.
Por estos motivos, tanto el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural como el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, a través de su Programa de Transformación Productiva (PTP) y de Procolombia, así como los gremios piscicultores, son coincidentes en su interés en mejorar la competitividad del sector, siempre dentro de un enfoque de desarrollo sostenible.
De acuerdo a las cifras del Programa de Transformación Productiva, el sector acuícola tiene un potencial de crecimiento en los mercados internacionales. Se busca aprovechar los TLC y los procesos de certificación internacional (de origen, de fair trade, de buenas prácticas acuícolas, Global GAP, ASC, entre otras) para reducir y superar barreras no arancelarias. A continuación se presentan cifras de PTP programa sobre divisas de exportaciones del sector[3][3]:
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Fuente: DANE ¿ DIAN ¿ Dólares FOB
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Sin embargo, de acuerdo a cifras recientes del Centro Virtual de Negocios (CVN), las importaciones de pescado al país han tenido un aumento considerable en los últimos años. De acuerdo con los datos del CVN, ¿las importaciones de pescado se han aumentado un 41% en 2014. En el 2012 llegaron al país 55.000 toneladas y en 2013 la cifra ascendió a 78.000 toneladas. Lo anterior se traduce en importaciones por un valor de US$136 millones y US$188 millones en 2012 y 2013, respectivamente. El 36% de las importaciones colombianas de pescado provienen de Vietnam, seguido de países como Argentina (9%), Costa de Marfil (8%), y Ecuador (8%)¿ [4][4].
Las cifras varían de acuerdo al Programa de Transformación Productiva, pero evidentemente las importaciones han venido incrementándose en los últimos años (salvo 2015 en la piscicultura), como se verá a continuación.
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Por ende, es necesario que se establezcan políticas públicas para hacer más competitivo el sector y examinar las condiciones de producción piscícolas y pesqueras, actuales y futuras, de los diversos embalses del país, dentro de un espíritu de armonización de los diferentes usos del agua, con especial énfasis, además de la piscicultura, para el uso que hace el sector hidroeléctrico, principal concesionario de estos cuerpos de agua, pero sin desconocer otros usos simultáneos como la pesca, el turismo, la agricultura y el transporte.
Así pues, los embalses pueden ser construidos con el objetivo de servir de reservorios de agua para el consumo humano, para el control de inundaciones, para la generación de energía eléctrica o para alimentar distritos de riego. En ese sentido nuestra normatividad los identifica con un carácter inicial ¿monopropósito¿.
La posibilidad de ser ¿multipropósito¿ depende en gran medida del propósito principal, así como de la priorización de los usos del agua según la metodología desarrollada por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) e incorporada a nuestra legislación, pero de ocasional cumplimiento. Es obvio que un embalse que sirve exclusivamente de reservorio de agua para consumo humano queda vedado en gran medida para la realización de otra serie de actividades. Sin embargo, lo mismo no se puede predicar de los embalses construidos para la generación de energía eléctrica, para alimentar distritos de riego o para el control de inundaciones.
Los embalses colombianos vienen siendo manejados por intereses particulares, generalmente por el sector hidroeléctrico, quienes imponen sus políticas a las autoridades regionales, en detrimento de otros posibles usos y beneficios para el país. Este es un escenario que se presenta fragmentado, no existiendo unidad de criterios a nivel nacional que sirva de referente a los inversionistas de la piscicultura...
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