Los judíos de la anticoncepción - 22 de Abril de 2015 - El Tiempo - Noticias - VLEX 566495926
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Los judíos de la anticoncepción

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Vincent

Ernst Grafenberg y Gregory Pincus

Florence Thomas*

Hoy quiero rendir un homenaje a dos hombres cuyos nombres son casi totalmente desconocidos para el gran público y quienes, hace ya un siglo, pasaron su vida pensando en lo que significaban la sexualidad y la maternidad para las mujeres. El primero, llamado Ernst Grafenberg, se preocupó por el sufrimiento de las mujeres víctimas de abortos clandestinos, mujeres que sabían que no podían alimentar un hijo más. Era judío, alemán y ginecólogo. Trabajaba en los barrios obreros de Berlín y debía atender a miles de mujeres pobres que morían durante abortos o simplemente al parir un octavo o noveno hijo. Decidió, entonces, buscar soluciones para poner fin a tantas desgracias. En 1928 inventa y logra construir un dispositivo intrauterino metálico, que consistía en unos anillos hechos de oro o plata, cuyo efecto inflamatorio volvía el útero refractario a la anidación, lo que impedía todo embarazo. Conoce entonces un inmenso éxito, y su consultorio se llena día y noche. Imagínense: en pleno auge del nazismo –Hitler llega al poder en 1933–, un médico judío logra que las mujeres puedan separar la sexualidad de la maternidad, y por el mismo efecto logra hacer bajar la curva demográfica del país. En 1937, el joven Grafenberg es arrestado. En 1940 logra abandonar el país y emigrar a los Estados Unidos. Llega a Nueva York, con su anillo contraceptivo en los bolsillos. Los médicos norteamericanos le hacen la vida imposible y se oponen a su método de contracepción. A pesar de ser declarado fuera de la ley, decide abrir un pequeño consultorio en Park Avenue. Y ahí empieza otra historia, porque en su nueva patria prosigue sus investigaciones sobre el aparato genital femenino y descubre una zona erógena en la pared anterior de la vagina. Fue entonces catalogado como el inventor del punto G. De hecho, Grafenberg, gracias a las confesiones de sus pacientes y de...

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