Justicia para una verdadera transición - 29 de Noviembre de 2014 - El Tiempo - Noticias - VLEX 546364766

Justicia para una verdadera transición

La expresión justicia transicional designa hoy no solo uno de los problemas más citados desde la teoría del derecho, al lado de formulaciones de ideas políticas, sino que es, y nombra así, sin duda, a uno de los más dramáticos dilemas a los que nos enfrentamos en la práctica. Hablo en el plural de dos generaciones de las que hago parte, de quienes tenemos todavía un rol político, en una histórica oportunidad, y estamos vislumbrando posibilidades y espacios en este tiempo excepcional para asumir el inmenso y crucial reto de construir una salida política dialogada del conflicto armado que por más de 50 años nos ha constituido con desgarros, truncando un futuro de buen vivir. Pues se trata, sin olvidar las necesidades de justicia, de verdad y de reparación, de ser capaces de elevar como derecho y columna vertebral la paz, y con esta, intrínsecamente ligadas, las garantías de no repetición. El académico Iván Orozco, asesor hoy del Gobierno en el proceso de La Habana, acertadamente señaló hace unos años cómo la justicia transicional es altamente política, trágica, emocional, limitada, parcial, y cómo produce memoria, cómo debe ser pedagógica, reparadora, y ofrecer verdad. Todo ello no solo en un entramado nacional, sino global, a través de múltiples mecanismos. Y es en la articulación más cualificada posible de esos mecanismos en la que deben residir la legitimidad y su función, en su proceso social, económico y político, de la verdadera reconciliación nacional. De tal modo, creo yo que, si no cumple con esas metas, que deben ser transformadoras del estado actual de pobreza y exclusión, o sea, de victimización, dicha justicia se reduce tanto a una cuestión instrumental jurídica que, como lo dice otro asesor del proceso en La Habana, Carlos Ruiz, estaremos solo ante un “derecho transicional sin transición”, y no ante lo que merece llamarse propiamente “justicia”. De ahí que, por seriedad y responsabilidad con el país, con el conjunto de la sociedad colombiana, debemos seguir pensando que la justicia transicional debe abordar por lo tanto el reconocimiento de causas estructurales para enfrentar esa violencia sistémica, que se manifiesta, obviamente, en lo político, en el cuadro del enfrentamiento militar, por supuesto, y también, innegablemente, en los planos social, cultural y económico. Señalada esa aclaración, ¿ante qué estamos? Estamos, sin duda, ante un Marco Jurídico para la Paz que es la constitucionalización de la justicia transicional en...

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