Memoria del subdesarrollo... - 14 de Marzo de 2016 - El Tiempo - Noticias - VLEX 630697298

Memoria del subdesarrollo...

Meluk le cuenta

Gabriel Meluk Editor de Deportes

Hace unos años, durante un encuentro de comunicadores sociales de la Universidad Javeriana, el catedrático, analista de medios y exdefensor del lector de esta diario Germán Rey lanzó una frase durísima sobre lo que para él es una muestra de nuestro subdesarrollo general como país. Palabras más, palabras menos, Rey dijo que entendía ese subdesarrollo porque somos muy grandes para lo pequeño y muy pequeños para lo grande. Esta semana vivimos de cerca dos noticias gordas por controles antidopaje. Una, la de la tenista rusa María Sharapova. La otra, la de la ciclista antioqueña María Luisa Calle. La rusa admitió haber tomado la sustancia que le marcó el positivo en el laboratorio. Si fue por error solo lo sabe ella. Es un tema de conciencia. Pero ese no es el punto. Ella le puso la cara al asunto, reconoció el consumo y aceptó ser sancionada. “Asumiré las consecuencias”, dijo. Todos los tenistas del circuito mundial, hombres y mujeres, más allá de los lamentos y de reconocer su “valentía”, se mostraron firmes en un sentido: debe pagar su castigo así haya sido, al parecer, involuntario; de ser sancionada así sea por un pecado cometido de forma inocente, pues el que inocentemente peca inocentemente se condena, dice el refrán. Varios patrocinadores de pesos pesados le retiraron o suspendieron sus giros de millones de euros, mientras que la gran prensa mundial alentó para que se siga con la lucha contra el dopaje caiga quien caiga, por más Sharapova que sea. Un tratamiento grande para un problema grande. Mientras tanto, por acá, en nuestra tierra, María Luisa Calle, quien por escrito aceptó el consumo de una sustancia sintética que no produce el organismo, puso fin por la puerta de atrás a su exitosa carrera llena de trofeos y medallas. Ella también citó a una rueda de prensa, esta en Medellín, en la que dijo que no se dopó, que está limpia, que no firmó la carta, que es inocente, pero que renunció a su defensa porque no la apoyaron, porque no tenía plata, porque se cansó de pelear, porque la culpa no era de ella sino de quienes la...

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