Proyecto de acto legislativo 154 de 2001 cámara
PROYECTO DE ACTO LEGISLATIVO 154 DE 2001 CÁMARA. por medio del cual se modifica el artículo 67 de la Constitución Política de Colombia.
Artículo 67. La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica y a los demás bienes y valores de la cultura.
La educación formará al colombiano en el respeto a los derechos humanos, a la paz y a la democracia; y en la práctica del trabajo y la recreación, para el mejoramiento cultural, científico, tecnológico y para la protección del ambiente.
El Estado, la sociedad y la familia son responsables de la educación, que será obligatoria entre los tres y los quince años de edad y que comprenderá como mínimo, tres años de preescolar y nueve de educación básica.
La educación será gratuita en las instituciones del Estado, sin perjuicio del cobro de derechos académicos a quienes puedan sufragarlos.
Corresponde al Estado regular y ejercer la suprema inspección y vigilancia de la educación con el fin de velar por su calidad, por el cumplimiento de sus fines y por la mejor formación moral, intelectual y física de los educandos; garantizar el adecuado cubrimiento del servicio y asegurar a los menores las condiciones necesarias para su acceso y permanencia en el sistema educativo.
La nación y las entidades territoriales participarán en la dirección, financiación y administración de los servicios educativos estatales, en los términos que señalen la Constitución y la ley.
Del honorable Congreso,
Franklin Donado Buelvas,
Representante a la Cámara.
Roberto Pérez Santos,
Senador de la República.
Siguen firmas ilegibles.
EXPOSICION DE MOTIVOS
La educación temprana, fundamento de una educación de calidad para todos
El país que quiera desarrollar su economía, inscribirse con éxito en el mundo de la globalización y la competitividad y alcanzar la justicia social, debe ofrecer a sus ciudadanos una educación de calidad, asegurándose de que todos se eduquen y se eduquen bien desde temprana infancia.
Esto implica que la educación universal de calidad ha de ser prioritaria entre las preocupaciones públicas y primera entre los esfuerzos nacionales. El Estado está en la obligación moral de brindarle educación pública estatal, a todos sus ciudadanos, si desea que estos logros se conviertan en una realidad. Educar es la prioridad, porque educar es la clave de la democracia política, el crecimiento económico y la participación social.
Ventajas de una buena educación
Una educación universal con calidad permite que:
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Haya una mayor integración cultural y participativa en la vida pública, social e individual de los ciudadanos de un país.
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Se logre avanzar en la superación de la pobreza.
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La economía nacional se incorpore en mejores condiciones a la globalización y al progreso técnico sostenido en la esfera productiva.
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Los individuos estén mejor preparados para acceder a empleos más productivos, obtener mejores salarios y alcanzar mayor movilidad social.
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Haya un avance significativo en la investigación científica y tecnológica.
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Se activen las iniciativas ciudadanas en la vida Municipal, Regional y Nacional, todo ello dentro de un marco del desarrollo de la Democracia.
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Se tengan mejores condiciones para el acceso a las industrias dinámicas de la sociedad del conocimiento: la Biotecnología, la Informática, la Microelectrónica, las telecomunicaciones, la robótica, la Aviación Civil, etc.
En fin, podemos seguir enumerando las ventajas de una buena educación, pero nos asalta el temor de caer en la tentación de convertirla en la panacea y darle el carácter curalotodo, cuando lo que queremos es precisar su posición y su importancia en el avance y desarrollo de cualquier país, incluyendo el nuestro.
La universalización de la educación
América Latina y el Caribe en su avance hacia la modernidad...
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