Tres instituciones cuestionadas que manejan 108.000 estudiantes - 17 de Diciembre de 2014 - El Tiempo - Noticias - VLEX 549151250

Tres instituciones cuestionadas que manejan 108.000 estudiantes

Antes de perder su investidura como congresista y de ir preso, como coautor de una masacre, César Pérez García se encargó de dejar asegurado el futuro de sus herederos. Como presidente de la Cámara, votó la aprobación de la Ley de Educación Superior (la 30 de 1992), y específicamente del artículo 132. Este obliga a que por lo menos la mitad de los recursos previstos para educación deben ser invertidos en programas ofrecidos por instituciones de economía solidaria, como su Universidad Cooperativa. Ese ‘articulito’ ayudó a robustecer la institución educativa que maneja su familia desde hace 35 años, que es la tercera con más estudiantes del país –47.712– y que está en la mira de autoridades. La senadora Claudia López ya les pidió a las autoridades revisar el patrimonio de la Cooperativa para establecer nexos con sus fundadores e indagar sobre un posible enriquecimiento ilícito. “Es un solo holding, manejado por los Pérez –afirma la senadora–. Si el patrimonio de la familia se deriva de la universidad, se debería evaluar si con este tendría que resarcir a las víctimas de la Unión Patriótica que murieron en la masacre de Segovia”. Igualmente, la senadora López califica de vergonzoso que en varias sedes cuelguen placas en homenaje a Pérez García. Además de esta institución, las autoridades indagan a otras dos, cuyas directivas tienen algún nexo familiar, entre ellas la Rafael Núñez y la Universidad Nacional a Distancia (Unad). En esta última se investigan desde sus posibles nexos con el llamado ‘carrusel’ de la contratación en Bogotá hasta la supuesta ilegalidad en la reciente elección de su rector, Jaime Leal, que él niega: “Mi reelección fue legal. La Ministra Parody está mal asesorada jurídicamente” (ver recuadros). El poder de los Pérez La indagación que se pidió en torno a la Cooperativa se encamina a establecer el poder que concentran familia y allegados a César Pérez, y el nexo con su patrimonio. “Se supone que es un servicio sin ánimo de lucro, pero todos sus hijos, sobrinos, y parientes tienen altos cargos en la universidad y en las empresas satélites que han creado”, asegura una denuncia de un funcionario de la institución. Y añaden que, tras ser encarcelado, César Pérez le pasó el manejo de la institución a uno de sus hijos, César Augusto, quien ostenta (desde el 2010) el cargo de rector nacional. Ligia González, esposa de Pérez, es la directora académica de la sede de Medellín y fundó otra universidad: la María Cano. Juan Carlos...

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