Wilton y el drama de la Sierra Nevada de Santa Marta - 30 de Agosto de 2021 - El Tiempo - Noticias - VLEX 875214232

Wilton y el drama de la Sierra Nevada de Santa Marta

José Alberto Mojica Patiño - Enviado especial de el tiempo - santa marta @JoseaMojicaP" ¡No te vayas a morir, no me vayas a dejar sola!", le suplicaba Saida a su esposo Wilton. Él se estaba desangrando. Le apretaba las manos intentando calmarla y luego la soltaba para pedirle, señalando con los dedos, que le metiera la lengua dentro de ese mazacote de sangre que era su boca. Una lengua que se asomaba —como una culebra— por el hueco que le dejó la bala que una hora antes le había atravesado la cara de un solo fogonazo, a la altura del pómulo derecho. Otro disparo le rozó la parte trasera de la cabeza sin causar más daños, según Medicina Legal. "Tenemos tantos sueños, tantas metas, una hija por la que tenemos que luchar", le respondió él, hablando como si tuviera un trapo entre los dientes; una voz que flotaba en medio de ese río rojo y desbocado por el que se le escapaba la vida. "Me miró, miró al papá, sonrió y cerró los ojos. Y yo sentí que me moría con él", dice Saida García con el alma acuchillada mientras recuerda la noche del 14 de enero del 2019, cuando mataron a su esposo: Wilton Fauder Orrego León, guardaparques del Parque Nacional Natural Sierra Nevada de Santa Marta desde mayo del 2016. Tenía 38 años. Saida y Wilton se conocieron el 13 de julio del 2002. Él había llegado meses atrás a trabajar como jornalero. Y ella estudiaba Secretariado Ejecutivo. Siete meses más tarde se casaron en una notaría de Santa Marta y la ceremonia fue en la iglesia evangélica donde se congregaban. Al poco tiempo nació Sheilis Milena. Ambos eran campesinos y desplazados por el conflicto armado. Él nació en el corregimiento de Mingueo, en Dibulla, La Guajira, y los paramilitares los sacaron a patadas de su parcela. Por otra parte, ella y su familia fueron expulsados por la guerrilla y los paramilitares desde San Juan Nepomuceno, Bolívar. Y se juntaron en Don Diego, vereda al oriente de Santa Marta, sobre el río del mismo nombre: un paraíso entre la selva y el mar, sobre la troncal del Caribe, que conduce a Riohacha, a hora y media de la capital. "A pesar del potencial económico de la región, una de las principales fuentes de financiación de los grupos armados ilegales, así como de las estructuras criminales, tiene que ver con lo que se ha denominado el ‘oro verde’, es decir, la industria del turismo". En Buritaca y Bahía Concha, por poner dos ejemplos, tras la fachada de ser peajes de las comunidades, se está cobrando el ingreso a los turistas; un...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR