Estructura administrativa de la gestión pública del patrimonio cultural en Colombia
| Autor | Fernando Charria García |
| Páginas | 237-275 |
III. Estructura Administrativa de la
Gestión Pública del Patrimonio Cultural en
Colombia
Pretendemos realizar un acercamiento a la estructura administrativa
en el ámbito de la cultura, en particular al del Patrimonio Cultural, toda
construcción del imaginario social82 pues además son piezas fundamentales
para la gestión del Patrimonio Cultural, no solamente desde la perspectiva
económica del Estado, sino también, desde la perspectiva de convertirse en
un ente capaz de presionar múltiples aspectos como los jurídicos-normativos,
los relativos a la profesionalización del sector, aspectos relacionados con la
internacionalización, entre otros.
En el sentido de las organizaciones hay quienes señalan que es una
lo estatal y se indica:
sociales (o agrupaciones humanas) establecidas intencionadamente para
la presencia de uno o varios centros de poder que revisan el desempeño y la
alguno no se adecúa a la s responsabilidades delegadas, y (iv) cuidando de su
esencia con mayor vehemencia que cualquier otro g rupo social”83.
En todo caso, las organizaciones en el ámbito cultural y por ende en el del
patrimonio cultural no escapan de la dimensión política “La organización de
patrimonio es un actor político con un papel preponderante en la construcción
82 Cornelius Lainstituciónimaginariadelasociedad, Tusquets editores, 1993.
83 Alejandra María y Antonino. Organizacióndelpatrimonio
culturalenColombia:Unacategoríainexplorada, Revista de Historia Regional y local, Volumen
9, Número 18, 2017, p. 383-421. DOI: https://doi.org/10.15446/historelo.v9n18.59638
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ya no solo de identidad”84, en cuanto son gestoras de representaciones
sociales, con importante impacto en la dimensión democrática al poder darle
la voz a personas que de otra manera no serían escuchadas “sino también de
participación democrática, al dar voz a personas que individualmente tienen
poco capital político”85, pero además tiene una importante dimensión en la
socialización de los vínculos con el pasado, con sus reinterpretaciones, con
los procesos identitarios que ello conlleva, así como también, los aspectos
económicos que cualquier tipo de organización requiere, pero en una condición
en la cual la importancia económica está más en cabeza del interés público
que del privado, por el fortalecimiento que pueden generar en las comunidades
interventoras en la valoración, cuidado y difusión del Patrimonio Cultural,
entre tantos otros aspectos.
Por otro lado, los aspectos organizativos de una estructura pública son
vitales, por eso:
“en el diseño que de una estr uctura administrativa se haga descansa, en
ámbito que sea. Este general valor de la orga nización administ rativa, esencial
vínculo de comunicación ent re el Estado y la sociedad, adquiere, a demás,
singular relevancia en el ámbito de los bienes cult urales en donde un amplio
y heterogéneo conjunto de factores vienen a convertirla en un elemento
verdaderamente capital d e la política cultural de nuestro tiempo. Las propias
característ icas de un sector normativo vertebrado a partir de conceptos
jurídicos indeter minados; la heterogeneidad de los bienes que se i ntegran
al Patrimonio Histór ico, una diversidad incompatible con un t ratamiento
normativo uniforme, p resupuesto, a su vez, de singular idades propias en el seno
de la Administr ación pública que lo aplica y la multiplicidad de competencias
que en este ámbito convergen constit uyen algunos de ellos”86.
El tratamiento pues, del Patrimonio Cultural, desde la perspectiva de lo
público, obliga a pensar en la necesidad imperiosa de:
“un servicio de colabora ción interadminist rativo absolutamente indispensa ble
en relación con los bienes culturales , de otra, la integración de profesionales
en esta rama de la Administración, tan dist inta, como es notorio, de otros
sectores de la función pública y en donde su actuación viene a depender,
84 Alejandra M. y Antonio. Op.Cit., p. 397
85 Ibid.
86 María. Concepción Laorganización administrativade lasBellas Artes.
Unasreexionesdefuturo, Patrimonio Cultural y Derecho, (n° 1), p.75 – 76.
239Tercera Parte. Insti tuciones de conservación del patrimon io cultural en Col ombia
casi por entero, del juicio de técnicos de una amplia gama de especialistas
procedentes de los más var iados campos del saber”87.
Con lo dicho hasta aquí basta para resaltar la gran import ancia que en este
campo ha de conferirse al principio de coordinación administrativa, ya que
nuestra constitución de 1991 nos habla de una República Unitaria descentralizada ,
al interior de un Estado social de derecho, con lo cual no se admite otra idea
distinta e imprescindible que esta de la coordinación administrativa, como
quiera que múltiples unidades o sino todas, de la Administración pública tiene
que ver con el Patrimonio Cultural, pero deberán acogerse a los lineamientos
y directrices que en este campo tiene la entidad encargada directamente de
ello, que en nuestro caso es el Ministerio de la Cultura, coordinación que no
solamente ha de entenderse en el ámbito de lo nacional, sino que ha de acoger
los diferentes niveles territoriales, tanto departamentales, como distritales,
municipales y de territorios de las diferentes etnias, sin lo cual, la pretensión
de que la cultura y con ella el Patrimonio Cultural sea base de la identidad
colombiana, será una utopía.
El otro aspecto que nos parece importante señalar, hace referencia a la
nos muestra que la “creación de técnicos en Patrimonio Histórico ha venido
y viene más por la vía de la formación posterior al ingreso en la propia
Administración que como una especialización, presupuesto de hecho del propio
acceso a los correspondientes cuerpos administrativos”88.
que se trata de que la aplicación de la normativa sobre Patrimonio Cultural,
está estructu rada sobre conceptos jurídicamente indeterminados, que implican
criterios y convenciones resultado de un lugar y un tiempo determinados, y
ante la actuación de lo público en este campo.
1. BIENES M EMORIA PÚ BLICA DE COLOMBIA: ARCH IVOS,
BIBLIOTECAS Y M USEOS
Las Bibliotecas, los museos y los archivos son tal vez las instituciones que
han tenido una mayor preocupación desde muy vieja data en el proceso de
87 María Concepción. Op.Cit., p. 76
88 , María Concepción, Op.Cit., p. 89
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