Pisos pegajosos, escaleras rotas y techos de cristal derechos humanos y dignificación del trabajo de la mujer en Colombia
| Autor | Dahiana C. Pedraza, Diana M. Herrera, Juan P. Sánchez |
| Cargo | Abogada y especialista en Derecho Constitucional de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá/Abogada de la Universidad Nacional de Colombia y estudiante de la Especialización en Derecho Público de la Universidad Externado de Colombia/Estudiante de Derecho en la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá |
| Páginas | 13-49 |
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PENSAMIENTO JUR ÍDICO, Nº. 57, ISSN 0122-1108, ENERO - JUNIO, BOGOTÁ, 2023, PP. -50
Pisos pegajosos, escaleras rotas y techos de cristal
Derechos humanos y dignificación del trabajo
de la mujer en Colombia*
Sticky Floors, Broken Rungs, and Glass Ceilings
Human Rights and Dignification of Women’s Work
in Colombia
Dahiana C. Pedraza**
Diana M. Herrera***
Juan P. Sánchez****
Fecha de recepción: 3 0/10/21
Fecha de aprobación: 3 0/04/23
* Artículo p resentado junto a la ponenc ia “Pisos pegajosos, escalera s rotas y techos de crista l”, prem iada
como una de las t res mejores ponencia s en el X concurso Est udiantil de Dere cho laboral de la Universid ad
Libre de Colombia con el te ma Retos de los derecho s humanos en el mundo d el trabajo.
** Abogada y espe cialista en Derec ho Constitucional d e la Universidad Nacional d e Colombia, Sede Bogotá.
Correo electrónico: dcpedrazap@gmail.com
*** Abogada de la Unive rsidad Nacional de Colombia y est udiante de la Especia lización en Derecho P úblico
de la Universidad E xternado de Colombia . Correo electrón ico: dimaherca@gm ail.com
**** Estudiante de De recho en la Universidad Na cional de Colombia, Sede Bogot á. Octavo semestre.
RESUMEN
En este documento s e busca analizar los
retos pendientes en m ateria laboral para
la garantía de lo s derechos huma nos en
torno a la no discr iminación y la igu aldad
material de opor tunidades en las muje res
trabajadoras de Colombia. Pa ra ello, se
tomarán los conceptos de pisos pegajosos,
escaleras rotas y techos de cri stal, como
críticas a la f orma como se han abordado
estos fenómenos, en donde, s i bien se
ha avanzado en la g arantía de der echos
humanos, aún pe rsisten discr iminaciones
y escenarios de mejor a.
el contexto his tórico de los derechos e
inserción labora l de las mujeres, así como
las brechas lab orales que persi sten en
-
mente, se hace un aná lisis de cada u no
de los retos y las forma s en que se han
intentado supera r en Colombia. Final-
mente, se estudia n algun as tendencias
de protección en país es que mejor han
protegido estos dere chos y se hace una
de mejora.
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PISOS PEGAJO SOS, ESCALERAS ROTAS Y TE CHOS DE CRISTAL DERECH OS HUMANOS Y DIGNIFICACIÓN DEL T RABAJO
Palabras clave: pisos pegajosos, escaleras
rotas, techos de c ristal, licenc ia de mater-
nidad, acceso labora l, ascenso laboral.
ABSTRACT
The objective of t his document i s to
analyze t he pending challenges i n labor
matters to gu arantee human ri ghts regar-
ding non-di scrimi nation and mater ial
equalit y of opportunit ies for working
women in Colombia. For this, t he con-
cepts of , broken stairs and
glass ceilings wi ll be taken as c riticism s
of the way in which t hese phenomena
have been approached, w here although
progress has b een made in guarante eing
human right s, discrim ination and impro-
vement scenarios s till persist.
With this a im, the sta rting poi nt is to
expose the h istorical context of women’s
rights and lab or insertion, as well as t he
labor gaps that pe rsist in Colombia today,
subsequently, an ana lysis is made of each
of the challen ges and the ways in which
they have tried to over come in Colombia.
Finally, some protect ion trends are s tu-
died in countr ies that have best protec ted
propose options for imp rovement.
Keyword s:
glass ceil ings, matern ity leave, job access,
job promotion.
IntroduccIón
“Todo el organismo de la mujer está adaptado a la ser vidumbre de la mater-
nidad y es, por tanto, la presa de la es pecie”, escribía Simone de Beauvoir en
1953. Con esto se daba ap ertura a la segunda ola femi nista, un acontecer de
reivindicaciones enfocadas a cuestionar las desigualdades formales y materiales
de la mujer respecto a su sex ualidad, autonomía, familia, y trabajo.
En ese entonces, se concluyó una idea centra l que perdu ra hasta nuestros días,
y es que, a lo largo de la historia de Occ idente, se ha as ignado a la mujer un rol
tradicional, asoc iado a las tareas del hog ar, la crianza y la manutención de la
familia como núcleo ba se de la sociedad. En pal abras de Beauvoir (1987), “el
cuidado de los niños y el ma ntenimiento del hogar son todavía soportados c asi
exclusivamente por la mujer” (p. 54).
Adicionalme nte, autores como Hartma nn (1996) parte n de reconocer las tenden-
cias sexi stas del hombre como antecedente al fenómeno de discr iminación, pero
denuncian a la par que la prev alencia actu al de estos fenómenos es resu ltado
del capital ismo:
La exclusión de la mujer de l trabajo asalar iado es debida primordia lmente
al capitali smo, porque este crea e l trabajo asal ariado fuera de l hogar al
trabajadores asa lariados pa ra el sistema c apitalist a. La mujer reproduce
la mano de obra, proporcion a cuidados psicológ icos a los trabajadores y
procura una i sla de intimidad en un mar de a lienación. (p. 5)
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Desde esa época la di scusión con respecto al rol social de la mujer ha sido rec u-
rrente, diferentes est udios, como los enfocados en cuestionar l a división público
privada de las relaciones del hombre y la mujer, han lleg ado a demostrar una
invisibili zación y subordinación femenina a l a esfera privada, esto es, a la s labores
ligadas a lo doméstico. En pal abras de Ha rtmann (1996): “En nuestra sociedad,
y reconocidas como inferiore s a los hombres, mientras que éstos sólo apa recen
las labores del hombre, siendo este últi mo quien históricamente se ha dedicado
a las activid ades as alariadas y profesionales.
Lo anterior se da en un e scenario en el cual las condiciones labora les, profesio-
nales y salar iales entre hombres y mujeres tienden a fenómenos de desigua ldad
constante, que, si bien han sido cues tionados (y de ellos han surgido políticas y
planes de acción alrededor de todo el planet a), hoy en día es cla ra la utopía que
representa un escena rio en el que tanto hombres como mujeres ocupen un luga r
Internaciona l del Trabajo [], “la mayoría de los hogares en América Lat ina
y el Caribe genera c uatro quintos de sus in gresos totales med iante el trabajo”
(2019), siendo este el pilar fundame ntal para el su stento mínimo v ital y las
posibilidades de desar rollo de sus miembros. Por tanto, la persistente historia
de las dispar idades en razón del género respec to al acceso, la estabil idad y el
crecimiento en el mu ndo laboral representa un reto v ital para la garantía y
protección de los derec hos humanos.
Estas desig ualdades extenúan vu lneraciones históricas a los derechos hu manos
de las mujeres, entre ellos los referentes a la igualdad, la no discrim inación,
la libertad, el l ibre desarrollo de la pers onalidad y los derechos se xuales y
reproductivos (su derecho a ser madre s y poseer los amparos de la ley), todos
en correlación direc ta con el derecho al trabajo, reconocido como fundamenta l
en la Constitución Política de Colombia de 199 1, conforme a la suscripción de la
declaración de la de 19 98 relativa a los principios y derechos f undamentales
en el trabajo y su segu imiento.
En este escena rio, conceptos como pisos pegajosos, escaleras rotas, techos y
paredes y acantilados de cristal convergen como representaciones a lo s retos
que atraviesan en la ac tualidad las mujere s de todo el mundo, en análisi s al
fenómeno desde diversos enfoq ues, como las condiciones sociales o económicas
de las cuales provienen, generando así un panora ma desde el cual puede n ser
examinad as las desigualdades del pres ente y donde se abre espacio para brindar
propuestas de abordaje frente a estos paradigma s.
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