El Programa Bolsa Familia y la participación ciudadana: idas y venidas - Núm. 10, Enero 2010 - Revista Opera - Libros y Revistas - VLEX 844562490

El Programa Bolsa Familia y la participación ciudadana: idas y venidas

AutorMilene Peixoto Ávila
CargoBacharel y Maestría en Ciencias Sociales por la Universidad Federal de San Carlos-ufscar
Páginas67-82
67
O PE R A , N o 10
* La autora tiene Bacharel y Maestría en Ciencias Sociales por la Universidad Federal de San Carlos–ar. Mi-
lene Peixoto Ávila es Licenciada y Magister en Ciencias Sociales de la Universidad Federal de San Carlos (ar). Es
becaria de la . Ha sido docente de Sociología de la escuela secundaria y de “Teoria Política Moderna y “Materia-
lismo Histórico” de la carrera de Ciencias Sociales del Instituto Federal de Educación, Ciencia y Tecnología Triángulo
Mineiro, Campus Uberaba-. También fue becaria del Programa  y estudió en la Universidad Nacional de
Rosario (Argentina), el curso de Relaciones Internacionales.
Artículo recibido el 6 de agosto de 2010. Aceptado el 23 de agosto de 2010. Correo electrónico: mipeixotoavila@
yahoo.com.br
1 Aunque sea notable el movimiento de reducción de la pobreza en Brasil en la última década, el número de per-
sonas en situación de pobreza extrema y absoluta es todavía muy relevante. La tasa de pobreza extrema (rendimiento
medio domiciliar per cápita de hasta un cuarto del salario mínimo, cuyo valor en moneda brasileña es de R$ 510,00
y en dólares, alrededor de $ 290,00), en 2008, fue de 10,5%. La tasa de personas en condición de pobreza absoluta
(rendimiento medio domiciliar per cápita de hasta medio salario mínimo), en 2008, fue de 28,8% (I, 2010).
INTRODUCCIÓN
Nueva o vieja pobreza, los programas de
transferencia de renta surgieron como una po-
sibilidad de solución contemporánea al viejo
problema de que existen en la sociedad perso-
nas que ni siquiera pueden obtener, por mis-
mas, el mínimo imprescindible para la super-
vivencia. Condicionada o no, la distribución
del dinero por parte del Estado directamente
a los clasicados como pobres, tiene como una
de las consecuencias, por lo menos en Brasil, el
aumento de los ingresos y del consumo entre
los más pobres1 de la sociedad.
En pocos años de implementación, el Pro-
grama Bolsa Familia (), con una cobertura
de más de 12 millones de familias, se convirtió
en el programa de transferencia de renta más
grande del mundo y ha servido de modelo para
varios países interesados en la lucha contra la
pobreza. Por eso, es el gran proyecto político
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A CC O uN T Ab I l I T y : E ST u d I OS C Om P AR A d O S E N P O l Í T IC A SO C I A l
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2 Es importante decir que aunque la gestión del  sea descentralizada, los tres niveles de gobierno (federal, estatal
y municipal) tienen responsabilidades y roles denidos en la aplicación, mantenimiento, scalización y control de la
política. Así que al gobierno federal le compete hacer la selección de los beneciarios que son registrados por las insti-
tuciones asistenciales de los municipios; realizar la scalización de la política (bajo la actuación del Ministerio Público
y del Tribunal de Cuentas de la Unión) y la investigación del cumplimiento (o no) de las condicionalidades. Las tareas
de los gobiernos estatales son más reducidas porque están direccionadas solamente a apoyar los municipios que tienen
la tarea de hacer funcionar la política. Es de competencia de los gestores municipales promover las condiciones para
validar la selección de las familias; coordinar los procesos de registro, selección, renovación, suspensión o exclusión
de las familias; estimular y movilizar a las familias para satisfacer las condicionalidades; informar periódicamente al
responsable del gobierno federal sobre los datos de cumplimiento de las condicionalidades; capacitar a los profesionales
involucrados con el registro; evaluar el desempeño del  en la ciudad, y apoyar los consejos locales para garantizar
el control social (F, 2007: 58).
en el área social del gobierno del Presidente
L y ha despertado la atención de los estu-
diosos y de la sociedad civil, preocupados con
los efectos (positivos y negativos) del acceso a
los ingresos, sin que exista una relación directa
con el trabajo.
En general, los estudiosos destacan po-
sitivamente los efectos económicos del pro-
grama, o sea, el crecimiento de los ingresos y
del consumo entre los más pobres, en un mo-
vimiento interpretado como de combate a la
profunda desigualdad brasileña. Sin embargo,
a pesar de la constatación de la ecacia de ese
tipo de intervención en la esfera económica y
el reconocimiento internacional, en la socie-
dad brasileña el consenso sobre el  no está
saldado. Las numerosas críticas y los temores
sobre el programa ya no son exclusivos de la
élite, sino que también aparecen en los medios
de comunicación y en los discursos, a veces
indignados, del ciudadano común.
Dejando de lado los discursos positivos
ociales (tanto del gobierno, como de algunos
institutos de investigación) y los discursos sos-
pechosos, y escuchando los que se benecian
de la política, o sea, favoreciendo el punto de
vista de aquello que recibe, es posible reconocer
otras opiniones, percepciones, sentimientos
y evaluaciones sobre el . Así que, cuando
observamos la operación del programa, consi-
derando el cotidiano de la política, la relación
establecida entre los beneciarios y los actores
responsables por la gestión del programa,
otros elementos emergen como fuentes de
investigación.
Es decir, al analizar los caminos que la
política hace desde la esfera federal hasta el
domicilio del beneciario es posible reconocer
la diversidad de formas de implementación
que el programa asume. Eso ocurre, entre otras
cosas, porque el  se basó en la descentra-
lización administrativa2 entre la Unión, los
gobiernos estatales y los municipios, dejando
como responsabilidad de cada municipio la
tarea de implementar y mantener la política
con la estructura y organización de sus institu-
ciones asistenciales. Estos procesos dieren de
una ciudad a otra y dependen, en gran parte,
de la estructura organizativa de la institución
responsable de asistencia social del municipio.
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