Evolución del análisis de políticas públicas como campo de formación e investigación en Colombia
| Autor | Nadia Rubaii y Pablo Sanabria Pulido |
| Páginas | 27-45 |
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Capítulo 2
Evolución del análisis de políticas públicas
como campo de formación e investigación en Colombia
Nadia Ru baii
y Pablo Sanabria Pu lido
Introducción
El propósito principal de este capítulo consiste en ofrecer un panorama general
descriptivo de la evolución y el estado actual de la educación en políticas públicas,
definida de manera amplia, como campo de estudio en Colombia. De este modo,
se verá con claridad que el estudio de las políticas públicas y, más específicamente,
el análisis de las políticas públicas basado en evidencia, es un campo que aún tiene
mucho camino por recorrer en el país. Un objetivo secundario del presente capí-
tulo es presentar un contexto que permita comprender los textos de los capítulos
subsiguientes, en lo relacionado con el papel que los actores gubernamentales y
no gubernamentales desempeñan en el análisis de las políticas públicas, así como
en la aplicación del análisis de políticas públicas en el marco de diversos ámbitos
sociopolíticos. Es posible comprender las razones de una limitada aplicación de
análisis rigurosos en diversos contextos, si se tiene en cuenta que solo desde hace
muy poco existe una oferta académica en la esfera del análisis de las políticas públi-
cas para los profesionales del servicio público, tanto aquellos que se encuentran en
ejercicio como los que aspiran a estarlo.
En Colombia, la educación en políticas públicas se imparte dentro del contexto
de un sistema de educación superior amplio, que a un mismo tiempo facilita y limita
su desarrollo. En la primera parte de este capítulo hacemos una contextualización
que permite entender el sistema de educación superior colombiano, tanto en tér-
minos de estructura institucional como en lo relacionado con los mecanismos de
aseguramiento de la calidad. En la segunda sección documentamos el desarrollo
de los programas de políticas públicas, y ubicamos esta discusión en el contexto del
también joven campo de la ciencia política en Colombia. Organizamos la discusión
por nivel de educación, a fin de suministrar un panorama general de la situación de
los programas de pregrado y de posgrado. Una discusión más detallada se hará en
torno a los programas de maestría, prestando atención a los tipos de diplomas ofre-
cidos, su ubicación institucional, disciplinaria y geográfica, además de su contenido
curricular. La última sección del capítulo reflexiona sobre el estado de la educación
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El análisis de las políticas públicas en Colombia
en políticas públicas en Colombia y su capacidad para contribuir al mejoramiento
de la calidad de la administración pública.
El contexto de la educación superior en Colombia
Según los datos más recientes reportados y recogidos para el 2018, el sistema de
educación colombiano cuenta con 292 instituciones (MEN, 2018). Estas se encuen-
tran clasificadas dentro de una de las siguientes cuatro categorías: universidades
(n=85), escuelas tecnológicas o instituciones universitarias (n=128), instituciones
tecnológicas (n=49) e instituciones técnicas profesionales. Cada categoría puede
incluir tanto instituciones públicas como privadas. En su totalidad, en el 2017, estas
instituciones recibieron cerca de 2,5 millones de estudiantes, distribuidos casi equi-
tativamente entre instituciones públicas (51%) y privadas (49%), y con más del 90%
en el nivel de pregrado (alrededor del 60% en programas tradicionales de pregrado
y 30% en programas técnicos). A nivel de posgrado, las universidades colombianas
otorgan tres tipos de títulos: especialización, maestría y doctorado. En este nivel, el
número de matriculados y de programas ofrecidos se reduce al aumentar el grado.
En el mismo año, dichos programas representaban el 4%, el 3% y menos del 0,5%
del total de matrículas de estudiantes, en los niveles de especialización, maestría y
doctorado, respectivamente (ME N, 2018).
Colombia cuenta con un avanzado y elaborado sistema para garantizar la calidad
de las instituciones y de los programas. El marco para el aseguramiento de la calidad
está determinado por la Constitución de 1991, que consagra la educación como un
derecho individual y una responsabilidad social, respecto a la cual le corresponde al
Estado “regular y ejercer la suprema inspección y vigilancia de la educación con el
fin de velar por su calidad, por el cumplimiento de sus fines” (art. 67). Rubaii y Lima
Bandera (2018) presentan un panorama general del sistema regulatorio de la edu-
cación superior en Colombia, que se sustenta en la Ley 30 de 1992 y está apoyado
por una red de agencias gubernamentales y mixtas relacionadas de alguna manera
con el MEN y entre ellas mismas. El Consejo Nacional de Educación Superior (CE SU)
planea y coordina las políticas relacionadas con la educación superior, y supervisa
el trabajo de otras organizaciones que comprenden tres sistemas diferentes pero
interdependientes y concurrentes para el desarrollo, la información y el asegura-
miento de la calidad. El componente de aseguramiento de la calidad (Sistema de
Aseguramiento de la Calidad en Educación Superior [SACES ]) está compuesto por
la Comisión Nacional Intersectorial para el Aseguramiento de la Calidad de la Edu-
cación Superior (Conaces) y el Consejo Nacional de Acreditación (CNA).
El sistema colombiano de aseguramiento de la calidad tiene dos niveles diferen-
ciados: una revisión obligatoria para garantizar un mínimo de calidad, supervisada
por Conaces, y un proceso de acreditación voluntaria de reconocimiento de la alta
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