El significado de la tolerancia liberal en un proceso de reconciliación - Segunda parte - Justicia transicional. Teoría y praxis - Libros y Revistas - VLEX 52394882

El significado de la tolerancia liberal en un proceso de reconciliación

AutorGuillermo Hoyos Vásquez
Cargo del AutorFilósofo, director del Instituto de Estudios Sociales y Culturales PENSAR, Pontificia Universidad Javeriana
Páginas183-203

Page 183

Introducción

La discusión de los últimos meses en Colombia, en torno al proceso de desmovilización de las Autodefensas, ha servido para tomar conciencia de lo complejo que se presenta en este momento el horizonte de la paz y para desarrollar un cuidadoso debate jurídico y político de mucha altura.12 El gobierno ha presentado como camino hacia la reconciliación la nueva Ley de "Justicia y paz", de la cual se esperaría el desarrollo de un modo de "justicia transicional"3 que contribuya integralmente a la paz entre los colombianos mediante la verdad, la justicia, la reparación y la reforma de las instituciones. De no ser así la ley estaría fomentando la impunidad4 Además hay sectores de opinión que estiman que es preferible, en situaciones como la colombiana, enfatizar más la "justicia restaurativa" que la transicional.

Los partidarios de la justicia restaurativa, es decir, de aquella que enfatiza de tal forma los aspectos de reparación de las víctimas, que en cierta forma renuncia a las otras componentes de la justicia de transición, se apoyan más en principios comunitaristas que liberales; insisten en las bondades de soluciones Page 184 concertadas en contextos nacionales con la sociedad civil como protagonista de la reconciliación. Por su lado, los defensores de la justicia transicional tienen también en cuenta el contexto internacional, bastante exigente hoy desde el punto de vista del derecho internacional humanitario y de su normatividad, de la defensa de los derechos humanos y de las exigencias de las víctimas. Para una justicia de transición son importantes tanto la reparación como la verdad, la justicia y la reforma de las instituciones.

Simplificando algo la discusión entre los dos énfasis de la justicia, habría que insistir más que en las diferencias, ante todo en la complementariedad de ambas concepciones de la justicia en contextos de conflicto armado y tratar de privilegiar las fortalezas de una u otra en función de los procesos concretos de reconciliación, siempre con la meta del avance hacia la paz, la convivencia y la construcción de democracia radical.5 En la discusión sobre los dos modelos y su complementa-riedad aparecen aspectos importantes de filosofía política y de filosofía del derecho, que corresponden al debate contemporáneo entre liberales y comunitaristas, por cuanto la justicia transicional enfatiza lo relacionado con lo justo y la restaurativa lo atinente a la vida buena. Quienes pensamos en la complementariedad proponemos, a modo de síntesis, lo igualmente bueno para todos, que responde ciertamente a la idea de universalidad de una moral de estirpe kantiana.

El objetivo de mi análisis no es terciar en la discusión de expertos acerca del modelo de justicia más acertado y del más oportuno políticamente para la situación colombiana actual. Parto más bien de una pregunta propia de la filosofía moral: ¿Podría aclarar algo ubicar la discusión en un nivel más abstracto desde un punto de vista moral? ¿En qué dirección permitiría avanzar en la búsqueda de la reconciliación una consideración moral? ¿Tiene sentido en situaciones extremas como la nuestra, donde la intolerancia nos tiene en el camino del no retorno, hablar de moral, o basta con urgir el derecho, perseguir el mal y afinar la política?

Para abordar esta pregunta quiero destacar algunos aspectos de la filosofía moral de Kant, que ayuden a contextualizar la disputa entre justicia transicional y justicia restaurativa, cuya complementariedad aparece como necesaria Page 185 a la luz de la tolerancia. Esto me llevará a profundizar en el sentido moral de la tolerancia, para comprender que la situación conflictiva, no sólo de Colombia, sino del mundo, se debe en gran parte a la intolerancia, así se piense con frecuencia que no sólo no es posible, sino que en general es equivocado responder a la intolerancia con tolerancia.

1. La paz como horizonte de reconciliación

Los procesos de reconciliación son para solucionar conflictos que frecuentemente terminan en guerras, muchas veces, como se dice 'entre hermanos'. Por ello quiero ubicar el sentido de la justicia transicional en la búsqueda del paso de la violencia y de la guerra a situaciones que favorezcan la convivencia. Y si se habla de justicia restaurativa es para restaurar condiciones que permitan la comprensión y la construcción colectiva de sociedad y de nación. Pienso en situaciones tan radicalizadas por una historia de crímenes que pareciera imposible hablar de reconciliación, dado que las partes en conflicto han llegado a tal grado de intolerancia que no parece posible una solución dialogada y concertada.

Quiero ante todo recordar que para Kant el camino hacia la "paz perpetua-mente"6 no es sólo asunto de cada una de las naciones en particular, sino que se relaciona con el derecho internacional. La reconciliación, gracias al Estado democrático de Derecho, no garantiza el derecho cosmopolita de todos los ciudadanos del mundo. Por ello, piensa Kant que tiene que ser posible una solución concertada de los conflictos a nivel mundial, con base en un derecho deducido de una moral con alcance universal y en clave cosmopolita, que haga posible al menos una federación de Estados.

Por otro lado, para Kant la búsqueda de esta paz, con alcance universal, es necesaria desde el punto de vista moral, dado que la guerra hace más personas malas que las que logra eliminar. En la Conclusión a la Doctrina del derecho escribe Kant: "Ahora bien, la razón práctico-moral expresa en nosotros su veto irrevocable: no debe haber guerra; ni guerra entre tú y yo en el estado de naturaleza, ni guerra entre nosotros como Estados que, aunque se encuentran internamente en un estado legal, sin embargo, exteriormente (en su relación mutua) se Page 186 encuentran en un estado sin ley; -porque éste no es el modo en que cada uno debe procurar su derecho".7

Hay que destacar ante todo el sentido utópico de la paz defendida aquí por Kant, en la perspectiva del imperativo moral. Se parte de un deber ser, no de un hecho, el de la violencia, el de la guerra interna o entre naciones, hecho que no ignora el filósofo, para buscarle solución al conflicto que lo genera. El mandato por la paz involucra no sólo las relaciones entre los ciudadanos en un Estado, sino entre los Estados, según lo indicábamos antes. "Por tanto -continúa Kant-la cuestión no es ya la de saber si la paz perpetua es algo o es un absurdo, y si nos engañamos en nuestro juicio teórico si suponemos lo primero, sino que hemos de actuar con vistas a su establecimiento como si fuera algo que a lo mejor no es, y elaborar la constitución que nos parezca más idónea para lograrla (tal vez el republicanismo de todos los Estados sin excepción) y acabar con la terrible guerra, que es el fin al que, como su fin principal, han dirigido hasta ahora todos los Estados sin excepción sus disposiciones internas".

Aquí se propone el camino hacia lo que parece utópico, para rescatar en la realidad el significado positivo del valor de acciones y de actitudes que se orienten por la idea de la paz; se considera que tiene sentido, por más que la realidad sugiera lo contrario, proponernos la paz como posible y orientar teleológicamente todos nuestros esfuerzos en esta dirección. Esto significa un desarrollo del derecho y de la justicia para establecer una constitución y unas políticas que sirvan para terminar la guerra y posibilitar la convivencia.

Kant insiste en el sentido del imperativo moral en contra de la guerra y a favor de la paz. No es asunto de posibilidad, de viabilidad empírica, no se trata de un argumento meramente sociológico, jurídico o político que pudiera ser derrotado por razones de seguridad nacional o por políticos oportunistas o por una realpolitik. Es un deber de la razón práctica el buscar la paz, así todas las circunstancias y los hechos mismos indicaran que ello no es posible. Es interesante descubrir en planteamientos como éstos la naturaleza misma de la argumentación filosófica: es contra fáctica, expresa una esperanza normativa, en cierta manera es utópica, se enmarca en el postulado de la razón práctica. Por Page 187 ello la conclusión es taxativa: quien sólo se deje orientar por la facticidad, por intereses particulares, permanece al nivel de los instintos, privado de razón, es decir de sentimientos de humanidad. Porque acceder al uso de razón significa atreverse a pensar, no sólo como posible, sino como necesaria la convivencia y la reconciliación humana, apoyada en el derecho como solución política razonable a la "insociable sociabilidad" de los humanos.

Esto nos permite comprender en toda su radicalidad la sensibilidad moral expresada por la opinión pública mundial, cada vez con mayor fuerza, en situaciones conflictivas: se trata de crímenes abominables, dicen unos; son guerras injustas, ilegales, desproporcionadas, inútiles, opinan otros. Todos parecen saber con toda razón que se está experimentando con valores absolutamente inviolables de los pueblos y de las ciudadanas y ciudadanos del mundo. Por esa razón el postulado de la razón práctica, en forma de utopía intramundana, como principio esperanza, nos permite soñar el dulce sueño de la paz, es decir, la posibilidad de que gradualmente podamos ir solucionando los conflictos que generan guerras, de modo concertado, en derecho y gracias a una política que lentamente va brillando en todo su esplendor.

En La paz perpetua afirma Kant que "los principios puros del derecho poseen una verdadera realidad objetiva, o sea, que pueden llevarse a buen fin, y que, en consecuencia, el pueblo en el Estado y los Estados en sus relaciones con otros Estados, han de comportarse de acuerdo con esos principios, digan lo que digan los políticos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR