V. El alegato previo a la audiencia - Iniciación a la abogacía - Libros y Revistas - VLEX 1028503912

V. El alegato previo a la audiencia

Páginas103-112
103
INICIACIÓN A LA ABOGACÍA
V
EL ALEGATO PREVIO A LA AUDIENCIA158
«Una hora de síntesis, por años de análisis».
FUSTEL DE COULANGES.
¡Cuántas veces nos hemos preg untado cómo, aquellos cuyo talento admira-
mos, han llegado a la maestría que le da tal autoridad a su palabra! ¿Cómo se
prepararán previamente a la audien cia? ¿Qué método de trabajo tienen? Cuestiones
que frecuente mente quedan sin respues ta. «Los augures, nos dice el Ba stonero
Cadroy, no revelan de buen grado sus secretos».
No obstante, hay reglas que deben seguirse en la preparación de un asunto; el
alegato no surge «armado de todas armas», como Minerva, del cerebro del abogado.
«Lo que a nte todo recomiendo a mi alumno, enseña Cicerón, es que, cualquie-
ra que sea la causa que haya de tratar, ha de estudiarla con cuidado y conocerla a
fondo, pues tendrá que mal pelear lo que mal conozca». El abogado debe lleg ar a la
audiencia dominando su expediente y con la cabeza llena de idea s. Cicerón critica
justamente a ciertos abogados que queriendo darse aires de gente muy ocupada, y
aparentando volar de un tribunal a otro, defienden sus asuntos sin siquiera haberlos
mirado, pues no es posible sino hacer una defensa vergonzosa y deficiente del tema
sobre el cual na da se sabe; hablarían de seguro algo mejor s i consagrar an algún
tiempo a meditar sobre su causa y otro poco a pelearla; la elocuencia, al igual que
la llama, necesita materia de qué alimentarse.
El cliente y su causa
«En cuanto a mí, decía también Cicerón, procuro que mi propio cliente me
instruya acerca de su asunto. Charlamos a solas, para que pueda explicarse con plena
libertad. Defiendo la causa de la parte adversa, a fin de obligarle a que defienda la
suya y a poner de manifiesto cuantas reflexiones le sugiera su caso. Una vez que se ha
ido, desempeño yo solo tres papeles distintos, y con la más completa imparcialidad,
ocupo sucesivamente el lugar de mi defenso, del adversario y del juez».
Un buen método consiste en conocer la documentación del cas o antes de la
visita del cliente, con el fin de poder dirigir la conversación y tener sobre él la
158 Hemos tomado por tít ulo de este capítulo, el del d iscurso pronunciado en 1919, en la
apertura de la Conferencia de los abogados de Burdeos, por el Bastonero Cadroy, de ese
Foro, y que es autor de un magistral estudio sobre la preparación del alegato.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR