Los límites del liderazgo: lidiando con dilemas inevitables
| Autor | Gustavo Caicedo Hinojos |
| Cargo del Autor | Politólogo colombo-mexicano de la Universidad del Rosario de Bogotá |
| Páginas | 107-124 |
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Los límites del liderazgo:
lidiando con dilemas inevitables
Es evidente que muchas cuestiones no son aún lo suficientemente
claras en la vía de las profundas transformaciones urbanas en
Colombia y el comprobado rol sobre estas de las grandes figu-
ras políticas. En concordancia con los pensamientos de Max
Weber respecto de la dominación política y sus limitaciones
(Weber, 1968), los académicos que han prestado atención al
liderazgo en el gobierno local, ya han anticipado algunas con-
secuencias poco deseables y límites ineludibles aún en aquellos
casos exitosos (Borraz y John, 2004; Jan Verheul y Schaap,
2010). Semejante preocupación estuvo igualmente presente
en las dos ciudades estudiadas en los capítulos anteriores, dado
que en muchos autores que trataron la recuperación urbana en
Medellín y Bogotá, los temas del personalismo, la continuidad
y el alcance social fueron reconocidos como evidentes desafíos
(Gilberto 2006; Pasotti, 2010; Dávila, 2009). En esta última
sección se reunirán las principales preocupaciones y riesgos a
propósito de los milagros urbanos liderados por los alcaldes en
Colombia, haciendo un intento para darles respuesta —cuando
sea posible—, pero aceptando que a priori muchas son en efecto
observaciones justas y que por ende ameritan mayor atención
en futuras reflexiones.
Milagros urbanos. Liderazgo y transformación urbana en Bogotá y Medellín
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1. ¿Hacia un autoritarismo urbano?
Ya mencionado fugazmente en el marco teórico, el impacto
negativo de los líderes y su proceso de personalización de la
política local es quizás el elemento crítico más presente entre
los estudiosos del liderazgo urbano. El ascenso desmesurado de
las personalidades públicas puede suponer una degeneración
de la política en la ciudad, hacia un poco deseable absolutis-
mo en los procesos de toma de decisiones y construcción de
estrategias de la administración metropolitana.1 Es justamente
lo que Borraz y John (2004) llamaron el estilo personalista en
el establecimiento de la construcción de decisiones, siempre a
la mano dada la capacidad del líder de: “Construir y moldear
marcos que otorguen significado a una situación o a un proble-
ma particular, sugerir soluciones o directrices, y establecer lazos
entre las identidades de los actores y los intereses” (traducción
propia) (Borraz y John, 2004, p. 113). El uso de narrativas
dramáticas y relatos de significación sensible como estrategias
de construcción de identidad e interés colectivos le brinda a los
líderes la opción —tentadora— de manipular la realidad urbana
de acuerdo a sus deseos personales.
Una crítica similar se encuentra en Jan Verheul y Schaap
(2010) quienes también denunciaron el problema de una ex-
trema personalización del juego político local, como potencial
resultado de la llegada de fuertes, expresivos e independientes
alcaldes al poder. Ellos veían en la expresividad del liderazgo,
el riesgo latente de convertir la política urbana en un proceso
unidireccional regido por la unipolaridad del poder, donde los
alcaldes terminarían dominando las redes de intereses y beneficios
políticos para su provecho. Los alcaldes expresivos, que saben
1 Ver dominación (Weber, 1968).
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