Perspectivas de lo social/laboral en tres momentos los albores, el enigmático caso de los contrapliegos patronales y las movilizaciones de 2019-2021 - Parte Temática - Constitucionalismo y comunicación política - Libros y Revistas - VLEX 954804394

Perspectivas de lo social/laboral en tres momentos los albores, el enigmático caso de los contrapliegos patronales y las movilizaciones de 2019-2021

AutorJuan Fernando Romero Tobón
Páginas191-294
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CAPÍTULO III
PERSPECTIVAS DE LO SOCIAL/ LABORAL
EN TRES MOMENTOS
LOS ALBORES, EL ENIGMÁTICO CASO DE LOS
CONTRAPLIEGOS PATRONALES Y LAS
MOVILIZACIONES DE 2019-2021
JUAN FERNANDO ROMERO TOBÓN
Estos escritos han t enido como destinatario a mi padre
ALFONSO ROMERO BUJ (1933-1976); viajan también hacia
mi madre NYDIA TOBÓN RICO (1929-2022), que partió un
primero de mayo. Ella fue un permanente ejemplo de resistencia
y libertad1.
UNA MANERA DE PRESENTAR
El debate en torno a lo social volvió a adquirir protagonismo a finales de 2019. Ese
emblemático año no sólo permitió traer a la memoria el centenario de las tres consti-
tuciones de 1917 a 19192 que, desde diferentes perspectivas, incorporaron importantes
clausulados sociales, sino que pasará a la historia también como aquel en el que se
realizaron importantes y sorprendentes movilizaciones en todo el mundo3 abande-
rando un importante petitorio social como un estandarte frente al frenético recorte a
1 Comp. NYDIA TOBÓN, Mis vivencias, Bogotá, Lobo Estepario, 2013 (1978).
2 Se trata de las constituciones mexicana de 1917, rusa de 1918 y alemana de 1919.
3 Además de la inconformidad francesa de los Gilets Jaunes o chalecos amarillos, que provenía de 2018, se
produjeron movilizaciones durante 2019 en el Líbano, Irak, Haití, Puerto Rico, Ecuador, Chile y Colom-
bia, entre otros países. Las realizadas en Ecuador (2-13.10), Chile (10-12), Bolivia (10.11.-12) y Colombia
(21.11.-8.12.) tuvieron como una de sus reivindicaciones principales la garantía de derechos sociales. La
movilización colombiana continuó en 2021 con un nivel de reivindicación alto, luego de los estragos de la
pandemia, pero no solo por ello.
ANUARIO XI: CONSTITUCIONALISMO Y COMUNICACIÓN POLÍTICA
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los derechos que ha planteado el fauno del modelo neoliberal-anarcoliberal4, auspiciado
a través de los organismos multilaterales financieros.
Por múltiples factores, el caso chileno es emblemático: además de ser pionero en el
impulso del decálogo durante la dictadura de AUGUSTO PINOCHET (1973-1990), la
resistencia social ha sido, sin duda, una vanguardia en Latinoamérica. En Chile,
además, la represión fue violenta y se expresó en todas las facetas del autoritarismo de
la dictadura que, desde ciertas perspectivas, tiene múltiples afinidades con la mercado-
cracia5. Resulta bastante aleccionador que un país que se jactaba, a través de sus diri-
gentes de turno, de haber “solucionado” la cuestión social y era ejemplo latinoameri-
cano de la aplicación estricta del decálogo anarco-liberal mercadocrático, aún durante
los gobiernos de la concertación, se encontrara sumido en una crisis que recorre en
toda la extensión “ese largo pétalo de mar y vino y nieve”6.
Esta exploración permite escudriñar, como en un poliedro, tiempos y secuencias
que dimensionan la lucha por lo social. En este sentido, es un aliciente para retomar
ciertos aspectos de la conflictividad laboral en Colombia durante el Frente Nacional,
acudiendo a las varias voces y entrevistas7 realizadas hace ya un buen tiempo en torno
a una persona que tuvo una importante figuración dentro de lo que se conoció como
el sindicalismo independiente; ese eco que sigue resonando y está asociado a la inves-
tigación en torno a los estados de excepción. Una historia que es, además, un capítulo
de la respuesta autoritaria, manifestación del contrasocialismo8, frente al desarrollo de
4 Los términos anarcoliberalismo o mercadocracia son mucho más precisos que el de neoliberalismo, que es el más
extendido, para dar razón de las ideas que se han im plantado en el mundo en los que se privilegia la asig-
nación del mercado. Incluso la expresión mercadocracia tiende a ser más exacta. En efecto, el prefijo neo no
expresa el elemento básico de ese modelo; además, contiene un eufemismo pues es un retorno al laissez
faire passer. Aparece en BERND MARQUARDT, “Democracia social, Una aproximación teórica e histórica al
Estado constitucional social en perspectiva comparada”, en ÍD. (Ed.), Constitucionalismo científico II, Entre el
Estado y el mercado (Anuario III de Constitucionalismo Comparado), Bogotá, Temis, 2013, págs. 3-68, 40-
44. Ver, igualmente, con la expresión anarco -capitalismo, LUIGI FERRAJOLI, Los fundamentos de los de-
rechos fundamentales”, en ÍD., et al., Los fundamentos de los de rechos fundamentales, Madrid, Trotta 2001, págs.
287-381, 373 y s. Desde otra perspectiva, el e conomicista THOMAS PIKETTY trae a colación los términos
hipercapitalismo y ordoliberalismo, asociados a esta clase de modelo, en Capital e ideología, Barcelona, Planeta,
2019, págs. 775 a 856.
5 INSTITUTO NACIONAL DE DER ECHOS HUMANOS, Informe anual sobre la situación de derechos humanos en Chile
en el contexto de la crisis social, 17.10.-20.11.2019, Santiago de Chile, IIDH, 2019.
6 PABLO NERUDA, Cuando de Chile, URL en bibl. final.
7 JUAN F. ROMERO T., Acerca de una tendencia político-sindical, de uno de sus gestores (Alfonso Romero Buj) y otros
sucesos de mención necesaria, trabajo de grado para el título de antropólogo, Bogotá, UNAL, 1993.
8 Se considera que, para efectos de e ste texto, es más preciso el término contra-socialismo pues el de anti-consti-
tucionalismo, aunque plantea un deber ser constitucional, no permite entender que los ordenamientos cons -
titucionales preveían esta clase d e mecanismos autoritarios que se enfocaron en bloquear el ideario social.
De otra parte, el término anti-socialismo tampoco re sulta satisfactorio en la medida en que lo antisocial se
asocia con trastornos de la personalidad. En JUAN F. ROMERO T., Por los caminos de la e xcepcionalidad, Bo-
gotá, Ibáñez, 2020. Ver, en cuanto al uso del término anti-constitucionalismo, BERND MARQUARDT, Historia
constitucional comparada de Iberoamérica, Bogotá, Ibáñez, 2016, pág. 427.
ROMERO: PERSPECTIVAS DE LO SOCIAL/ LABORAL EN TRES MOMENTOS
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los derechos sociales en el país a través de un suceso poco conocido pero que marcó
un hito dentro de la concepción del garantismo, aún antes de que se hablara del prin-
cipio de progresividad. Este tópico ambienta uno adyacente relativo a la figura del
asesor político sindical como pivote en la defensa de los derechos sociales.
Desde esta perspectiva, este artículo no abordará los procesos de constitucionaliza-
ción de lo social como tal, tema que se desarrolló en otros textos9, a salvo la rechazada
constitución chilena de 2022, sino de sus zonas aledañas: el escenario del siglo XIX
previo a la constitucionalización con énfasis en la formación de una nueva rama del
derecho, el derecho del trabajo y su repercusión en el país, el conflicto suscitado por la
presentación de un contrapliego por parte de la Federación de Cafeteros de Colombia
a su sindicato, a mediados de la década del sesenta del siglo pasado, y cinco décadas
después, el reavivamiento casi que intempestivo de la lucha social con la serie de mo-
vilizaciones de 2019, con su extensión a 2021 en el caso colombiano, centrado en
cuatro países latinoamericanos que, fruto de ello, y en medio de la pandemia, tres de
ellos vivieron cambios en sus destinos políticos. En realidad, como se espera demos-
trar, esas movilizaciones están estrechamente asociadas con la oposición a la implanta-
ción del modelo de recorte de derechos sociales y muy especialmente los de protec-
ción al trabajador y su familia; en cierta medida, tienen lazos fuertes con las primeras
luchas proletarias en Europa, cuando por estos territorios avanzaba el proceso inde-
pendista.
El presente itinerario puede suscitar cierta sorpresa. Pareciera un capricho realizar
esa amalgama de momentos que, en sí mismos, tienen su propia especificidad y perte-
necen a espacios y tiempos diferenciables. No obstante, esta asociación pretende
construir puentes y amojonamientos que permitan reflejar la complejidad de lo social,
como una ilusión inacabada de dos siglos, y volver a preguntarse por ese destino a
ciento seis años del primer proceso de constitucionalización en el mundo, a más de
dos siglos de las primeras leyes de protección al trabajador y a medio siglo de la defini-
ción del primer contrapliego presentado en Colombia, a través de un continuum en la
lucha por lo social. Si el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX se enfocaron en
ampliar los niveles de bienestar y mitigar en algún grado la explotación del trabajador,
en la segunda mitad del siglo XX y lo que va corrido del siglo XXI se han desarrollado
una serie de medidas tendientes al recorte de tales derechos, especialmente a partir de
las tesis anarcoliberales que cuestionan todas las facetas de intervención del Estado,
objetan la existencia de un salario mínimo o plantean su reducción10 e impulsan con-
9 ROMERO T., Por los caminos de la excepcionalidad, op. cit., e ÍD., “El péndulo del constitucionalismo social”, en
BERND MARQUARDT et al. (Eds.), Querétaro 1917 & Weimar 1919, Anuario VIII de Constitucionalismo Compa-
rado, Bogotá, Ibáñez, 2019, págs. 225-338.
10 Para el Ministro de Hacienda y Crédito Público del gobierno DUQUE hasta 2021 (que lo fue también de
URIBE V. de 2003 a 2007), ALBERTO CARRASQUIL LA, el salario mínimo en Colombia es muy alto,
REDACCIÓN SEMANA, “E l salario mínimo en Colombia es ridículamente alto”, en Semana, de 7.11. 2018,
URL en bibl. final. Ese funcionario fue el florero de Llorente de la movilización social de 2021.

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