Planificación de la ejecución del proyecto
| Autor | Raquel Campo Arranz/María del Campo Domínguez/Víctor Rodrigo Raya |
| Páginas | 94-118 |
94
GESTIÓN DE PROYECTOS © RA-MA
Tras realizar el análisis de viabilidad de un proyecto y el diseño del mismo, la siguiente fase consistirá en llevar a
cabo su planificación. En el presente capítulo se presentan al alumno los aspectos clave sobre los que será necesario
trabajar para desarrollar esta planificación y para sentar las bases de las posteriores fases de ejecución, seguimiento
y control del proyecto.
4.1
PLANIFICACIÓN TEMPORAL DEL PROYECTO
Una vez se ha definido el alcance y la estructura de descomposión del trabajo (WBS o EDT) del proyecto, tal y como
se ha detallado en el capítulo anterior, se estará en disposición de llevar a cabo la planificación temporal del proyecto.
En el presente apartado se describirán los pasos necesarios para llevar a cabo esta planificación:
nDefinición de actividades.
nSecuenciamiento de actividades.
nEstimación de la duración de las actividades.
nDesarrollo del cronograma o plan de proyecto.
nControl de la planificación.
4.1.1 DEFINICIÓN DE ACTIVIDADES
El punto de partida para la identificación y definición de cada una de las actividades que componen un proyecto
es el trabajo realizado previamente para desarrollar la estructura de descomposición del trabajo (EDT o WBS). Es
en dicha estructura donde se han especificado todas las actividades, tal y como se ha descrito en el Apartado 3.7.2;
a partir de este punto, dichas actividades van a usarse para elaborar el plan de proyecto, es decir, se van a emplear
para elaborar una guía con las actividades a realizar y el orden de las mismas. Por tanto, se deberá decidir si, bajo
este enfoque:
nEl nivel de descomposición de cada rama de la EDT es suficiente o se debe bajar a un nivel de detalle mayor
para identificar todas y cada una de las actividades del proyecto.
nEs necesario descomponer alguna tarea concreta para que pueda ser entendida y controlada con mayor detalle.
nPuede ser necesario o interesante agrupar algún conjunto de tareas, por ejemplo, tareas que van a ser
responsabilidad de otro departamento o empresa y que no es necesario controlar en detalle.
Una vez se han ajustado, detallado y redefinido todas las actividades del proyecto, se estará en disposición de
analizar las prioridades de ejecución de unas sobre otras, sus dependencias o su duración, entre otros aspectos, con el
objetivo de definir el plan de proyecto.
95
© RA-MA 4 n PLANIFICACIÓN DE LA EJECUCIÓN DEL PROYECTO
4.1.2 SECUENCIAMIENTO DE ACTIVIDADES
El secuenciamiento de actividades consisirá en establecer el orden en el que se van a realizar las distintas
actividades del proyecto, estas podrán ejecutarse:
nSucesivamente, cuando existan actividades que solo puedan llevarse a cabo una vez hayan finalizado las
anteriores. Estas actividades dependientes unas de otras deberán completarse secuencialmente.
nSimultáneamente, cuando las tareas son independientes, es decir, sus fechas de inicio o finalización no
dependen de ninguna otra actividad. Se tratará entonces de tareas que conviene desarrollar de forma paralela
al resto de tareas del proyecto, ya que realizar absolutamente todas las actividades de manera secuencial
supondría alargar los plazos del proyecto sin necesidad.
Teniendo en cuenta esta posibilidad de planificar la ejecución de las actividades de manera sucesiva o en paralelo,
el siguiente paso será definir cuál es la secuencia de realización más lógica y conveniente entre las distintas
actividades del proyecto. Para lo cual se pueden seguir los siguientes pasos:
1Definir las fases globales que va a tener el proyecto. Con respecto a las fases, ha de tenerse en cuenta que
también aquí se aplica el hecho de que ciertas fases se deberán ejecutar de manera secuencial, mientras que otras
podrán ejecutarse en paralelo. Ejemplos de fases de un proyecto serían las fases de planificación, diseño, desarrollo,
despliegue, puesta en marcha, etc.
2Para cada una de las fases, definir los hitos o puntos de control que permitirán dar por cerrada una fase y
comenzar con la siguiente. Ejemplos de hitos podrían ser la aprobación de los requisitos de la solución, la entrega
del documento de diseño o la recepción del producto, entre otros.
3Dentro de cada fase, identificar las dependencias entre actividades, es decir, las actividades cuyo comienzo o
finalización depende del comienzo o finalización de otra actividad. Existen en este sentido tres tipos de dependencias
o relaciones entre las actividades:
a. Inicio a inicio: actividades que tienen que comenzar necesariamente cuanto se inicia otra. Por ejemplo, la
actividad de seguimiento del proyecto, que debe comenzar obligatoriamente en el momento en el que se lanza
la primera de las actividades del proyecto.
b. Final a inicio: actividades que no pueden comenzar hasta que finaliza otra. Esta dependencia es la más
habitual. Por ejemplo, la tarea de solicitar la compra de materiales no puede comenzar hasta que finalice la
tarea de definición de los materiales que es necesario adquirir.
c. Final a final: actividades que no pueden finalizar hasta que finaliza otra, deben concluir en el mismo momento.
Por ejemplo, la actividad de cierre de proyecto, que no puede concluir hasta que finalice la última de las
actividades del proyecto.
4Finalmente, y dentro también de cada fase, identificar aquellas actividades que tengan carácter prioritario.
Se tratará de identificar aquellas actividades que están bloqueando un mayor número de las denominadas
anteriormente actividades dependientes y, por tanto, interesa empezar y concluir cuanto antes para poder seguir
avanzando en el proyecto. Ejemplos de estas actividades de carácter prioritario suelen ser las relacionadas con
aspectos de planificación, definición y diseño, entre otras.
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba